Sigue doliendo Grecia: es producto de un
virus depredador que preconiza la misma enfermedad por contagio masivo en otros
países de la eurozona. Al depredador le importan un carajo los países y mucho
menos sus gentes. Acumula dinero de aire y de humo, solo existente en los
apuntes virtuales de sus sirvientes y lacayos, pero ese aire y ese humo mata,
humilla, aniquila a millones de personas de carne y hueso.
¿Qué futuro tienen nuestros hijos y
nuestros nietos, los hijos y los nietos de nuestros nietos, después de una
campaña de acoso y derribo de cuanto hasta ahora contábamos como servicios
sociales, como derechos humanos y libertades cívicas? Somos únicamente carne de
recorte, de poda, de amputación. Y la tragedia es que aquí no se mueve ni dios,
como si l@s protagonistas (=víctimas) de esta tragedia no fuéramos tod@s y cada
un@ de nosotr@s. Ayer oí más de una vez la expresión “tomar las armas”. Pero
las armas las tienen nuestros amos, deseosos de que nos mostremos violentos
para coser a cañonazos y balazos a los insurrectos. La única esperanza que
resta al esclavo es que sus condiciones de vida no sean iguales o peores que
las del esclavo vecino.
Hoy, 14 de julio, aniversario de la Toma de la Bastilla. Qué lejos queda la Revolución Francesa, la Ilustración. El Antiguo Régimen avanza y avanza. Sus señores no se muestran, no son conocidos. Solo conocemos a sus marionetas, a sus polichinelas.
Hoy, 14 de julio, aniversario de la Toma de la Bastilla. Qué lejos queda la Revolución Francesa, la Ilustración. El Antiguo Régimen avanza y avanza. Sus señores no se muestran, no son conocidos. Solo conocemos a sus marionetas, a sus polichinelas.
DdA, XII/3026
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