Félix Población
Mi estimado colega Suso del Toro
inicia hoy su artículo en El Diario.es con algo que compartimos muchos y puede
ser, a su vez, compartido por muchos ciudadanos más en un futuro inmediato: “Si algo atestigua los
consensos del sistema político español es la unanimidad en los ataques
destructivos a Podemos. Se deben a que es una formulación política que
cuestiona esta democracia limitada nacida de la Transición y señala que ha
llegado a su fin. Como nadie quiere perecer, los partidos, los intelectuales y
todos los poderes establecidos reaccionan y defienden su existencia tal como llegaron
hasta aquí”.
Algunos de esos partidos y otros
colectivos, en efecto, han tomado nota, y ahí tienen a Alberto Garzón (IU, 28
años), Ada Colau (Guanyem Barcelona, 40), Sánchez (PSOE, 42), Madina (PSOE,
38), liderando o camino de renovar el liderazgo de esas formaciones a partir
del nacimiento y primer éxito electoral de Podemos. Significativamente, solo el
partido que más y con más mala baba está atacando a Podemos, el PP, se mantiene
por ahora al margen de esta renovación generacional que se apunta en los
citados.
Parece que también en la radio
pública, adscrita como nunca a la tutela del Gobierno y en notable caída de
audiencia, se pretende “ser indiferente” a la información generada por Podemos.
Periodistas de Radio Nacional de España (RNE) han denunciado haber recibido órdenes
de no emitir en sus informaciones declaraciones de Podemos o de sus líderes,
especialmente de Pablo Iglesias, según afirman en un comunicado, en el que
añaden que no todas las emisoras practican esta censura. Así se hace constar en
el último
informe del consejo de informativos de RNE (CdI) en el que se asegura que “al menos un miembro de la dirección de Informativos dio instrucciones de
no incluir, en la medida de lo posible, testimonios de Pablo Iglesias hasta
nueva orden y de que, en caso de que una noticia lo haga necesario, se consulte
directamente con el director de informativos", dice el acta del consejo.
El lector recordará que también
Pablo Iglesias y Podemos tuvieron que cosechar su éxito en las urnas para que
el diario El País les dispensara la atención que antes se les negó. Hoy leo que este diario,
bajo la nueva dirección de Antonio Caño, no se conforma con su reñida
competencia con ABC en publicitar ditirambos y panegíricos de empalago servil a la nueva familia real, sino que ha decidido eliminar la voz libre de la mayoría de sus blogueros, acaso por entender que la
influencia de éstos podría imponerse a la de su regresiva línea editorial.
Estoy convencido de que la
clausura de esos blogs se hará notar en una mayor pérdida de lectores del
periódico, que en el último año ha sido del 6 por ciento, tal como ha
ocurrido con los oyentes de RNE en el transcurso de la actual legislatura, con una programación al margen de la realidad y unos servicios informativos manifiestamente manipulados.
No me resisto a terminar este
artículo con el último párrafo del que hoy firma Suso del Toro acerca de
Podemos: “Seguramente no habrán dado con la piedra filosofal que le dé una
nueva orientación histórica a la izquierda, si es que ello es posible, pero han
creado una fuerza política que, además de ser ya una presencia ineludible, es
un gran bien social”. Quienes no lo
consideren así -añado- están condenados a perder audiencia y votos, porque el porvenir -ya sea en el periodismo o en la política- nunca se escribe al margen de lo que pasa en la calle.
Puntos de Página
Presentación de nº 6 de la revista Cuadernos de El Diario.es
La política y el periodismo que ya están en marcha.
DdA, XI/2.736
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