Lazarillo
Los calificativos que definen al profesional del periodismo no los pone este Lazarillo, que hace ya mucho años eligió estudiar esa carrera sin que le atrajera lo más mínimo llegar a esos resultados. Quien así califica a mis colegas es Carme Hermida, profesora de Gallego de la Universidad de Santiago de Compostela, que imparte ese idoma en la facultad de Ciencias de la Comunicación. Doña Carme ha decidido pedir el traslado a otra Facultad a raíz del tratamiento periodístico que está recibiendo en los medios la muerte de la niña Asunta Basterra Porto. Como hemos podido comprobar, a poco que sintonicemos cualquier canal de televisión, es auténticamente deleznable el espectáculo montado al respecto entre tantísimo facultativo y experto titulado en el engolfamiento de la morbosidad.
Entre los motivos esgrimidos para llevar esa petición a la próxima reunión de su departamento, con el horizonte del próximo curso, no sólo está según la citada profesora "la información que hacen -o les obligan a hacer- esos periodistas que ha contribuido a formar. También, según ha reseñado asimismo, "otros comportamientos que vienen de atrás" y que no ha especificado. "Personal y profesionalmente no tengo fuerzas para invertirlas en la formación de personas que sabes seguro que se van a convertir en seres morbosos, manipuladores, mentirosos, despreciativos, pagados de sí mismos e irreflexivos", concluyesu escrito la profesora, dado a conocer en una red social. Debo admitir que en la época en que este Lazarillo ejercía el oficio para su mantenencia, ya eran más los colegas afectados de esas taras que los periodistas que las repudiaban. No creo que la mejor formación de las generaciones actuales haya mejorado ese desequilibrio. Más bien al contrario.
DdA, X/2.499
Entre los motivos esgrimidos para llevar esa petición a la próxima reunión de su departamento, con el horizonte del próximo curso, no sólo está según la citada profesora "la información que hacen -o les obligan a hacer- esos periodistas que ha contribuido a formar. También, según ha reseñado asimismo, "otros comportamientos que vienen de atrás" y que no ha especificado. "Personal y profesionalmente no tengo fuerzas para invertirlas en la formación de personas que sabes seguro que se van a convertir en seres morbosos, manipuladores, mentirosos, despreciativos, pagados de sí mismos e irreflexivos", concluyesu escrito la profesora, dado a conocer en una red social. Debo admitir que en la época en que este Lazarillo ejercía el oficio para su mantenencia, ya eran más los colegas afectados de esas taras que los periodistas que las repudiaban. No creo que la mejor formación de las generaciones actuales haya mejorado ese desequilibrio. Más bien al contrario.
Puntos de Página
+@Da vergüenza ser periodista
+@Seis familias sionistas controlan el 96% de los medios de comunicación occidentales
+@Seis familias sionistas controlan el 96% de los medios de comunicación occidentales
Pinchaduras
El ex periodista Ben Ashford, del diario The
Sun, de Gran Bretaña, propiedad del magnate Rupert Murdoch, se convirtió
en el primer procesado bajo la Operación Tuleta, que investiga el
hackeo de computadoras para obtener información privada. El delito se
habría cometido en octubre de 2009, en el marco de las pinchaduras que
realizaron los medios de Murdoch para obtener primicias. En paralelo a
la Operación Tuleta se lleva adelante la Operación Elveden, que analiza
el pago de coimas a la policía y oficiales públicos para conseguir
información.
DdA, X/2.499
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