jueves, 26 de septiembre de 2013

LA DEMOCRACIA Y LA EDUCACIÓN SEGÚN MANUEL AZAÑA


Lazarillo 

Entre las mejores lecturas que recuerda este Lazarillo están muchas páginas de Manuel Azaña, a quien tuvo el privilegio de leer por primera vez después de que comprara en una feria de libro antiguo y de ocasión, hace ya muchos años, una primera edición de su libro El jardín de los frailes, extraordinaria narración y recreación de sus recuerdos  como alumno del colegio de El Escorial, en el mismo monasterio de Felipe II. Mi apreciado amigo el escritor Luis Arias, admirador de don Manuel y buen conocedor de su obra, tiene hoy a bien compartir este fragamento de Azaña sobre la democracia y la educación, un texto que Arias dedica a quienes enterraron el esfuerzo en demagogia convirtiendo la docencia en una profesión bufonesca, así como al señor Wert, que se ha juramentado para darle la puntilla a la enseñanza pública en España. La democracia, dice don Manuel, es sobre todo un avivador de la cultura. Esto es, si una agoniza, la otra sigue sus pasos. Dice Azaña:

"La democracia que sólo instituye los órganos políticos elementales, como son los comicios, el parlamento, el jurado, no es más que aparente democracia. Si a quien se le da el voto no se le da la escuela, padece una estafa. La democracia es fun­damentalmente un avivador de la cultura. En los países donde el sufragio no ha ido antes a la escuela, se busca el descrédito y la falsificación de la democracia. Pero no se haga de esto un ar­gumento para retirar los derechos políticos, so pretexto de que los ignorantes no pueden usarlos. Esta es la argucia preparada, esperada por los enemigos de la libertad, que para algo dejan a los pueblos pudrirse en las tinieblas. Nada se aprende a hacer si no es haciéndolo. ¿Se prohíbe andar al niño mientras no sepa andar?»  

Añade Luis:  
Más sobre Azaña y la Escuela. Tomen nota gentes del PSOE como Bono y Álvaro Marchesi. Tome nota el señor Wert. En materia de enseñanza, Azaña estaría hoy a la izquierda de IU, y eso que se declaró burgués. Qué cosas. Veamos estas palabras: "En la enseñanza queremos fundar la instrucción y educación sobre bases rigurosamente científicas. El cultivo de la inteligencia, la formación del carácter, constituyen una ciencia con principios tan firmes y tan demostrables como los teoremas de la geometría; si esos principios se quebrantan, todo se viene al suelo. Por lo tanto, debe proscribirse de la enseñanza cuanto vaya contra su propio fin; todo prejuicio, todo dogmatismo, todo propósito anticipado que no sea el único de ilustrar y dar a conocer. Así como no hay una manera atea y otra mahometana de explotar las minas ni trabajar el hierro, tampoco hay un sistema católico, ni cismático, ni budista de aprender la física, ni, en general, de agudizar el espítiru, de ponerle en aptitud de llegar a enterarse, que es de lo que se trata. Esta tarea, que es la más larga, es la decisiva. "Dadme la Universidad -decía Renán- y lo demás os lo abandono todo"

La Frase: Morimos el día en que guardamos 
silencio ante las cosas que importan.


DdA, X/2.495

No hay comentarios:

Publicar un comentario