domingo, 10 de marzo de 2013

EL PRÍNCIPE FELIPE SE AUSENTÓ DE LA TOMA DE POSESIÓN DE NICOLÁS MADURO

 
 Lazarillo

El príncipe de Asturias representó a España en las exequias por la muerte del presidente venezolano Hugo Chávez, pero no se quedó durante la ceremonia de la toma de posesión del vicepresidente Nicolás Maduro, a diferencia de otros mandatarios. De este modo, coincidió con la extrema derecha venezolana, representada por el opositor Capriles.

En las calles de Caracas se siguió el acto por miles de personas que no dudaron en abuchear a Felipe de Borbón cuando las imágenes de la transmisión televisiva lo pusieron en primer plano. El recuerdo de la multitud por la agresión del rey Juan Carlos con aquel famoso “¿por qué no te callas?” estaba en la memoriade los televidentes.

Como bien se ha recordado en los medios venezolanos en más de una oportunidad, un país donde el Jefe del Estado no es elegido, sino que se trata de un cargo heredado, no debería dar ejemplos de nada, sobre todo si se tiene en cuenta que quien así lo dispuso fue un dictador de la talla de Francisco Franco, apoyado por Hitler y Mossolini para llegar al poder a través de un crudelísima guerra civil.

El potentado escritor Mario Vargas Llosa compara hoy, en el artículo que siempre deseó escribir y que publica el diario El País bajo el títular La muerte del caudillo, el dolor sufrido por el pueblo venezolano ante la muerte de Hugo Chávez con el experimentado por el pueblo español con ocasión del fallecimiento de Franco. Tan aguda equivalencia revela el valor que se le puede dar al artículo.

PUNTOS DE PÁGINA
En Argentina valoran tanto a Chávez como en Venezuela
Seis de cada diez argentinos tienen buena opinión del fallecido Hugo Chávez. Pero lo notorio es que ese porcentaje es casi idéntico al que se registra en Venezuela, donde también más de seis de cada diez venezolanos opinan bien o muy bien del líder bolivariano. Al mismo tiempo, tanto allá como aquí existe consenso en que debe seguirse el modelo, el rumbo trazado por Chávez. Esto tiene obviamente un peso decisivo en Venezuela, donde se realizarán las elecciones el 14 de abril: todo indica que Nicolás Maduro, señalado por el propio Chávez como su sucesor, parte con una enorme ventaja (ver nota en página 2). Casi el sesenta por ciento lo votaría, frente a apenas un treinta por ciento que respalda a la oposición. Lo que también se percibe es que se mantiene el eje Brasil–Argentina–Venezuela como fuente de liderazgo en Latinoamérica.+@Página/12

HASTA SIEMPRE, COMANDANTE

DdA, IX/2328

No hay comentarios:

Publicar un comentario