sábado, 23 de marzo de 2013

EL ABRAZO DE DOS PAPAS Y LA MEMORIA DE EMANUELA ORLANDI

Francisco y Ratzinger se saludan tras el aterrizaje del primero en Castel Gandolfo.- Reuters 
Félix Población

Algunos medios no tuvieron en cuenta el detalle, pero cuando el recién nombrado papa Francisco acudió a la pequeña iglesia de Santa Ana -ubicada en el propio recinto de El Vaticano- a celebrar su primera misa, tuvo al término de la ceremonia un encuentro sin protocolo con los fieles. Esta circunstancia favoreció indudablemente que entre ellos se encontraran la madre y el hermano de Emanuela Orlandi, la adolescente desaparecida en 1983, hija de un profesor empleado en El Vaticano. El secuestro tuvo lugar el 22 de junio del citado año, cuando la joven de 15 años salía de sus clases de música, y desde entonces sus familiares persiguen desesperada y afanosamente el esclarecimiento de tal desaparición, sobre la que han circulado especulaciones varias. La última información al respecto la he leído en una publicación mexicana. Lo cierto es que Pietro Orlandi, el hermano de Emanuela que mantiene abierta una página web con su nombre, se acercó al papa Francisco y habló con él unos minutos.Transcribo la información publicada el 18 de marzo por el diario Corriere della Sera:

Al quarto giorno di pontificato, nel suo primo bagno di folla, il Papa venuto «dalla fine del mondo» scambia alcune parole con i familiari della «ragazza con la fascetta», emozionatissimi. «Emanuela, tu sei il fratello?», esordisce Jorge Mario Bergoglio. Sì, risponde Pietro Orlandi, che gli prende la mano nelle sue, sopra e sotto, come a non lasciarselo sfuggire. «Santità, io mia sorella la cerco viva, ci spero ancora». E poi, avvicinandosi al suo orecchio: «Volevo chiederle se lei mi può aiutare ad arrivare alla verità». Papa Francesco sussurra: «Caro Pietro, coraggio...» Ma è il contatto fisico, sono le parole non dette a scaldare più il cuore: «Mentre pronunciavo quella frase — racconterà Orlandi — mi ha stretto forte la mano e sorriso. Ho avuto la sensazione di un’intesa, di vicinanza. Mi ha incoraggiato... E per me che da 30 anni lotto per la verità sul sequestro di mia sorella è stato bello, ho pensato che il muro di silenzio che dura da due pontificati si sta incrinando». Qualcuno riprende la scena. Poco dopo la foto del fratello con il Papa è nella pagina Facebook su Emanuela. I commenti rimbalzano sul web. «Che emozione!» «Sono ottimista per la nostra Manu...» «Viva Francesco!».

La familia de Emanuela Orlandi nunca había tenido oportunidad de hablar de la extraña desaparición de la joven con los anteriores pontífices. Sentir la misericordia cambia todo; es lo mejor que podemos sentir porque un poco de misericordia hace al mundo menos frío y más justo, dijo Francisco poco después  del encuentro con los Orlandi, durante el Ángelus en la Plaza de San Pedro y ante 300.000 fieles. Por misericordia le pide la familia Orlandi, santidad, justicia para Emanuela. ¿No se lo ha recordado, santidad,  a su predecesor y papa emérito en la conversación privada que ha mantenido hoy con él en en la biblioteca de Castel Gandolfo y de cuyo singular e histórico encuentro donde los haya da testimonio la fotografía?

DdA, IX/2341

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