lunes, 27 de febrero de 2012

¿SERÁ POSIBLE "PÚBLICO. ES"?


Félix Población

A juzgar por la información en exclusiva que hoy da a conocer el periódico, suministrada por Wikileaks y referente al espionaje estadounidense, tal pareciera que Público.es pretende arrancar con fuerza, una vez concluida la etapa del diario en papel. Sin embargo, cabe preguntarse si el proyecto es viable, a pesar de que Jaume Roures lo asegurara en la última reunión que mantuvo con el consejo de administración.

Para ello no basta afirmar, como hizo el empresario y ex periodista catalán, que los ingresos publicitarios son suficientes para servir de soporte al proyecto, pues bien sabe Roures que la publicidad generada hasta ahora por Público.es estaba asociada a la edición en papel del periódico, con sus firmas de colaboradores y columnistas, y el grueso de la información basado en la que aparecía en la edición impresa. Al no darse la aportación periodística que suministraba fundamentalmente esta, tampoco se dará la correspondiente aportación publicitaria, con el consiguiente riesgo de pérdida de valor del producto.

Teniendo en cuenta que el producto contaba hasta ahora con 5,5 millones de usuarios únicos y dado que desde hace un par de meses se preveía que el destino de Público en papel era el que fue, lo más aconsejable para razonar su afirmación por parte de Jaume Roures hubiera sido preparar entonces una reestructuración de Público.es con vistas a su única publicación en la Red, de modo que el diario electrónico no quedara a expensas del vacío que ahora ha supuesto la desaparición del periódico impreso.

Ese vacío, por breve que sea, puede comportar la pérdida de valor del producto, lo que sin duda repercutirá en los ingresos por publicidad. Para que eso no ocurra y el proyecto no se venga abajo antes de su necesario y deseable relanzamiento, tendría que empezar a saberse ya cuál va a ser la plantilla de Público.es, cuál va a ser el equipo directivo y quiénes los colaboradores, y hasta quizá el nuevo diseño que requerirá la exclusiva y específica edición electrónica. No estaría de más, tampoco, definir la línea ideológica, pues puede que la competencia con otros medios progresistas aconsejara un reforzamiento en su orientación izquierdista.

Cuanto más se tarde en dar una contestación al respecto a esos millones de lectores que hasta ahora lo siguen, más serán las posibilidades de que Público.es pierda de vista el positivo horizonte que ha sabido ganarse a lo largo de estos cuatro años y pico.

+@Sobre "Público". (Ignacio Escolar)

3 comentarios:

Folía dijo...

Que hagan algo ya. No podemos quedarnos sin Público.

Popular dijo...

Es probable que se estén dando ya esos pasos y que muy poronto tengamos lo que en el artículo se reclama. Supongo que lo más difícil es seleccionar una plantilla mucho más reducida, de la que quedarán exentas las dos terceras partes del personal que ahora la forma, y eso siendo muy generosos.

Anónimo dijo...

Un ejemplo a seguir: Il Manifesto, en Italia. ¿O es que somos tan distinto para no tener un diario de ese tipo?

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