Félix Población
Ayer dijo el presidente Barack Obama lo que sigue: A partir de hoy, los estadounidenses patriotas en uniforme no tendrán que mentir más acerca de quiénes son para servir al país que aman; a partir de hoy, nuestras Fuerzas Armadas ya no perderán las extraordinarias habilidades y experiencia de combate de tantos miembros del servicio homosexuales y lesbianas. Eso quiere decir que hasta ayer mismo, transcurrida una década del siglo XXI, la patria de las barras y las estrellas solo permitía que los homosexuales la sirvieran siempre que sobre algo tan fundamental en la vida de las personas como la orientación sexual guardasen el máximo secreto o mintieran, como afirma el presidente.
Hasta ahora, por lo tanto, los homosexuales que se confesaban como tales no podían ser patriotas porque la patria los apartaba del servicio de armas para serlo. ¿Y los soldados homosexuales muertos hasta ahora en combate? ¿Qué clase de patriotismo puede ser ese que justifica una mentira tan esencial sobre la condición humana? Mentían acerca de quiénes eran para ser patriotas, afirmó Obama. ¿Que patria puede ser esa en la que no hay libertad para decir lo que se es cuando se es soldado?
No hay comentarios:
Publicar un comentario