Lazarillo
La recolección anual de la aceituna es una afirmación anual de la conexión histórica, espiritual y económica de los palestinos con su tierra y un rechazo a los esfuerzos israelíes de apropiársela. Los palestinos han trabajado los olivos durante miles de años. Quizá algunos conozcan el poema de Miguel Hernández Andaluces de Jaén, aceituneros altivos, musicado por Paco Ibáñez. La cosecha anual de aceituna es un símbolo de vida para las comunidades palestinas.
La producción agrícola durante los últimos años no dejado de descender notablemente como consecuencia de los cierres y cercos israelíes que prohíben el acceso de los palestinos a sus tierras y a los mercados. De no ser por la ocupación israelí, los campesinos palestinos de Cisjordania podrían conseguir el doble de beneficios de los alrededor de cien millones de dólares que cada año supone el comercio de aceite de oliva. Sería también decisivo en este sentido que se hicieran algunas inversiones económicas y se modificaran los métodos de cultivo, según noticia difundida hoy por la ONG Oxfam
La barrera de Israel y los ataques crecientes a los campesinos y a sus familias en los campos hace que la conquista del pan en Palestina sea cada vez más dura porque cada vez les falta más tierra. Más de medio millón de olivos y árboles frutales han sido destruidos por Israel en el último decenio. La agricultura palestina está siendo arrasada por la política represora de los sucesivos gobiernos israelíes, consitente en impedir a la larga que los palestinos tengan el derecho a su tierra, su pan y su vida en libertad.
Por todo eso participo y suscribo el comunicado de Amnistía Internacional con referencia a la recogida de la aceituna: "En muchos países la recogida de la aceituna se festeja y se celebra como un acontecimiento especial, donde la familia se reúne a comer y a beber alrededor de la cosecha que se ha recogido. Excepto para la población palestina de gran parte de Cisjordania.
Allí los agricultores viven estos días angustiados a la espera de que el gobierno israelí les conceda los permisos para poder acceder a sus tierras y recoger su cosecha. Si no los reciben, la cosecha se perderá y con ella una parte importante de su medio de vida. La agricultura es la fuente primordial de la economía palestina, y los olivos son una fuente de subsistencia para gran parte de la población.
Cada día es mayor el número de agricultores a los que el ejercito israelí deniega el paso a los cultivos. Actualmente sólo 180 de los 3.200 habitantes de Jayyus tienen acceso a sus tierras. Sus olivares, como los de miles de palestinos, han quedado encerrados al otro lado del muro que Israel está construyendo a través de la Cisjordania ocupada.
La temporada de la recogida empieza en octubre y los habitantes de Jayyus necesitan urgentemente todo el apoyo posible para poder acceder a sus tierras. Por favor, firma hoy nuestra petición: ahora es el momento crucial para presionar a Israel y que otorgue o renueve los permisos".
Palestinos de Jayyus, decidme en el alma ¿quién, quién levantó los olvos? : Dentro de la claridad/ del aceite y sus aromas,/ indican tu libertad / la libertad de tus lomas. Dijo Hernández.
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