miércoles, 4 de febrero de 2009

WALLERSTEIN AUGURA EL FINAL DEL CAPITALISMO


Lazarillo

Recientemente estuvo en Madrid, para dictar una conferencia sobre la crisis del capitalismo, el sociólogo Immanuel Wallerstein (Nueva York, 1930), autor de libros como El moderno sistema mundial y Capitalismo histórico y movimientos antisistema. Presidente del Fernand Braudel Center de la State Univesity of New York, sus críticas al capitalismo global le han granjeado un reconocido prestigio junto a intelectuales como Noam Chomsky y Pierre Bourdieu.

No obstante, y pese al interés informativo que la opinión de Wallerstein tiene sin duda a la hora de analizar la actual crisis económica y financiera en el contexto histórico del capitalismo, sólo el diario Público concertó una entrevista con el sociólogo estadounidense, que dio a conocer en su edición del pasado domingo sin que tuviera la menor repercusión en el resto de los medios. Llama la atención el titular que la resumía a cuatro columnas: El capitalismo no existirá en 30 años. Lo dice quien auguró mucho antes de que ocurriera, durante el largo periodo de la guerra fría, el derrumbe del bloque soviético.

Interrogado por el periodista Carlos Prieto acerca del carácter extraordinario que puede tener lo que le ocurre al sistema desde hace unos cuantos años, Wallerstein asegura que lo extraordinario es que "el ciclo coyuntural se agrava al enmarcarse dentro de otra crisis que arrancó hace 30 años. Me refiero al fin del actual sistema-mundo capitalista y la consiguiente transición hacia otro sistema. Todavía no sabemos qué va a ocupar el lugar del capitalismo porque dependerá del resultado de una lucha política que aún se está dirimiendo".

Respecto a si la actual coyuntura puede ser un enésimo ciclo de caída y auge del sistema capitalista, Wallerstein responde categóricamente: "Definitivamente, no. Las posibilidades de acumulación del sistema han tocado techo. Podemos estar seguros de que en 30 años ya no viviremos bajo el sistema-mundo capitalista. Pero, ¿en qué sistema viviremos entonces? Podría ser un sistema mucho mejor o mucho peor. Todas las posibilidades están abiertas. La solución la encontraremos cuando se resuelva el conflicto entre lo que yo denomino el espíritu de Davos y el espíritu de Porto Alegre. Ahora bien, si no se afronta políticamente la cuestión del fin del capitalismo, es posible que lo que surja sea aún más extremo que el sistema actual, que en mi opinión es tremendamente injusto".

Otra observación a tener en cuenta es la que hace Immanuel Wallerstein con relación al fin del ciclo político de hegemonía que hasta ahora ha tenido su país en nuestro mundo: "Estados Unidos seguirá teniendo un peso importante, pero dudo de que pueda reconquistar su posición dominante debido a la multiplicación de centros de poder como China, Brasil, Europa, etc".

Presiento que el silencio mediático con el que la presencia de Wallerstein fue acogida en España hace áun más llamativas y trascendentes estas declaraciones. Por eso no he querido dejarlas caer en el olvido.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Suenan mucho más claras las palabras cuando las rodea el silencio.

Anónimo dijo...

Para tratarse de los prolegómenos de una nueva época que suceda a los quinientos años de capitalismo, no parece que nuestra izquierda esté muy preparada, eso es lo que nos debería preocupar ahora mismo a quienes desde posiciones de izquierda no vemos a nuestros partidos, sindicatos y demás con capacidad de concienciación y/o movilización.¡que vamos por los 4 millones parados, oigan!

Benito García Pedraza dijo...

Wallerstein se droga.

Juan Carlos Frías dijo...

Marx sostenía en los Grundrisse que dos son las tendencias con las que se encuentra cualquier empresario en un momento dado: una reducir sus costes al máximo (p.e. costes laborales) y otra, incrementar sus beneficios para lo cual ha de emplear una mayor cantidad de recursos productivos (p.e. contratar a más trabajadores) pero ambos están fuertemente condicionados por las oportunidades de inversión en ese momento dado. Cuando las oportunidades de inversión (acumulación) se reducen de manera generalizada el sistema puede entrar en crisis. El sistema capitalista ha salido de estas crisis (de acumulación) consecuencia de la falta de oportunidades de inversión de diversas formas: innovaciones tecnológicas, colonialismo, por procesos semejantes a los de la "acumulación primitiva" por los cuales se mercantilizan áreas que antes no estaban integradas en el sistema de mercado, etc, etc. En ningún caso me parece razonable pensar que no sucederá lo mismo en este caso, es decir que se repita lo que ya ha ocurrido otras veces. Es posible que el sistema salga con algunos cambios pero entiendo que será muy difícil que sea muy diferente.

Un saludo,

J.C.

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