viernes, 13 de febrero de 2009

PARADOS MÁS BARATOS, DIRECTIVOS MÁS FORRADOS


Lazarillo

Como es sobradamente sabido, el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, hizo unas polémicas declaraciones recientemente en las que reclamó una reforma urgente del mercado laboral español para hacer frente a la recesión económica, lo cual significa que es favorable al abaratamiento del despido en unos tiempos tan alarmantemente proclives al crecimiento del desempleo como los actuales.

Tanto el presidente del Gobierno como el ministro de Trabajo, así como los sindicatos y el Partido Popular, han rechazado esa alternativa. ZP la consideró neoconservadora e ineficaz, y el ministro Corbacho no cree que deban ser únicamente los trabajadores los que tengan que hacer un esfuerzo para salir de la crisis. UGT y CC. OO calificaron de inaceptable y antisocial tal indicación y el portavoz económico del PP, señor Montoro, estimó que son inadmisibles mensajes de ese cariz que suponen más amenazas para los asalariados.

El criterio expuesto por el gobernador del Banco de España, además, se opone de modo casi inmediato como réplica discrepante al compromiso formulado por el Presidente del Gobierno durante su última comparecencia en el Congreso, en la que se mostró favorable no sólo al mantenimiento sino incluso al incremento de la cobertura social para todos los desempleados.

A propósito de las declaraciones del señor Fernández Ordóñez rastreo hoy en el documentado blog de Rosa María Artal el cuadro de salarios mínimos y medios vigente en los países europeos de nuestro entorno, así como los comentarios que la excelente periodista hace con relación a los emolumentos del personal directivo en España. En ese privilegiado escalafón ocupamos el quinto lugar de Europa -a nivel de Suecia- , algo que ostensiblemente no ocurre con la retribución mínima y media del común de los ciudadanos, que sólo supera a las de Grecia y Portugal. El sueldo medio de un directivo ronda los 4 millones de euros anuales, con una revalorización anual del 15 por ciento.

Por contra, según dice Artal, en España hay 11 millones de “mileuristas” -sueldos iguales o inferiores a mil euros mensuales-. Seguimos ganando un 33% menos que nuestros vecinos de la antigua Europa de los 15. Con un nivel medio de impuestos, una de las más altas elevaciones de precios desde la entrada del euro, nuestro poder adquisitivo ha mermado en los últimos diez años. La OCDE lo ha cuantificado. Dice que el salario real medio español ha bajado un 4% en esta última década.

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