Félix Población
Leo en el diario El Plural del día de la fecha que el embajador de Italia en España asistió el pasado 2 de noviembre, festividad de los Fieles Difuntos, en compañía de otros altos representantes diplomáticos de aquel país en España, a una ceremonia religiosa en la iglesia de san Antonio de Padua de Zaragoza en memoria de los 4.000 soldados italianos que, según la web del partido ultraderechista Acción Juvenil Española (AJE), murieron durante nuestra Cruzada de Liberación.
En el transcurso de la ceremonia, según se especifica en la información, la enseña de la Asociación Nacional de Combatientes Italianos (ANCIS), muy vinculada con la extrema derecha, estuvo al pie del altar mayor, y el oficiante rezó el correspondiente responso en memoria de los caídos. Estaban presentes en el llamado Sagrario Militar, cuenta José María Garrido, varios representantes de partidos de extrema derecha españoles, así como un pelotón de soldados de infantería del Ejército español, con el general gobernador a la cabeza, que rindió honores a los caídos italianos, según AJE.
Al término de la ceremonia, prosigue la información, hubo brindis por el bando equivocado y se cantó el Cara al sol brazo en alto. El agregado militar de la embajada italiana, a requerimiento del diario El Plural, ha querido dejar claro que, a pesar de contar con la presencia de la Asociación Nacional de Combatientes Italianos, la delegación diplomática no tiene nada que ver con quienes al término de los actos oficiales se manifestaron de esa forma, sin aducir razón alguna que explique el motivo por el cual esos actos se siguen celebrando en memoria de quienes lucharon como soldados del fascismo mussoliniano a favor del fascismo franquista. Porque no creo que en el ceremonial cuenten, a juzgar por la concurrencia, los brigadistas italianos caídos por defender la República Española.
Esta noticia coincide con la que ayer publicaba el diario El Mundo acerca de la iniciativa promovida por el partido neofascista Movimiento Sociale Fiamma Tricolore, que bajo el señuelo de afrontar el problema de la despoblación en la región de Basilicata, una de las más pobres del país, ofrece 1.500 euros a modo de cheque-bebé a las familias que bauticen a sus hijos con los nombres de Benito o Rachelle, en memoria del dictador italiano y su esposa. Alegan los promotores, en primer lugar, que se trata de dos nombres precisosos, ¿no les parece?, y porque somos (el MSFT) un partido muy ligado a nuestros orígenes y no olvidamos nuestras raíces ni nuestra historia.
Esos orígenes y esa historia, ya que se habla de conmemorarlos en el nombre de los recién nacidos, costaron entre 35 y 60 millones de muertos durante la segunda guerra mundial y algo más de un millón en el transcurso de la Guerra Civil y la posguerra franquista, si comprendemos en la cifra la sobremortalidad durante el conflicto, la caída de la natalidad después y las consecuencias de la represión. Esas raíces y esa historia sólo merecen el nombre de barbarie, totalmente improcedente para dar nombre a la vida que nace.
1 comentario:
¿No deberí interesarse la ministra Chacón por investigar a esos funcionarios militares presentes en la ceremonia? ¡Cómo una noticia de este calado puede pasar desapercibida en los medios? ¿Pasa deparecivida o la pasan?
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