jueves, 11 de octubre de 2007

Don Mariano Rajoy se corona de españolía

Félix Población

Lo del PP en el transcurso de la ya agonizante legislatura no ha sido una travesía por el desierto, como se conoce a los periodos en que un partido purga sus errores, sino un sometimiento a ese árido hábitat hasta tal punto que ha terminado por resecar la capacidad de perspicacia política con la que deberían contar sus líderes para mantener unas ciertas expectativas de recuperar La Moncloa. Así lo demuestra una vez más el último episodio gestado desde el aznarato genovés, ese vídeo franco en el que don Mariano Rajoy, más que aspirar a la sede de la Presidencia del Gobierno, parece ambicionar las atribuciones propias del inquilino de La Zarzuela y Jefe del Estado español.

Yo no sé a que lúcido cerebro se le ocurrió la idea de dotar a la edición de este año de la Fiesta Nacional del membrete de exclusividad propio del Partido Popular, pero quienes hayan asistido con un cierto detenimiento al proceso seguido por su airada oposición recordarán que todo empezó en aquellas manifestaciones masivas y reiteradas en las que el PP prestó cobertura a una determinada asociación de víctimas del terrorismo, como si todas las víctimas de la violencia fueran también sus víctimas. En alguna de ellas se concluyó la convocatoria con la audición del himno nacional, cuya utilización partidista es contraria a la ley.

También es de recordar que el año pasado, durante el desfile conmemorativo del 12 de octubre, hubo en las proximidades de la tribuna presidencial una claque de celosos patriotas que abucheó al Presidente del Gobierno de España. Tan bochornosa representación de españolía es probable que vuelva a repetirse mañana, pues para eso está la brillante capacidad de exaltarla que el vídeo del señor Rajoy comporta.

Ignoro si al referirse este don Mariano coronado y rey por un día a la necesidad de demostrar mañana en la calle el orgullo de ser españoles, para celebrar así -de manera especial y por razones que todo el mundo conoce- la Fiesta Nacional, cuenta con el concurso de esos grupúsculos que ojalá no se hagan notar con su baladro en torno a la tribuna del Paseo de las Castellana.

De lo que no tengo ninguna duda es del peligroso efecto que pueden tener los mensajes de quienes se arrogan una representatividad similar a la del Jefe del Estado, con himno, enseña y corona como símbolos partidistas en exclusividad. Lo confirma nuestra memoria histórica y no es recomendable cebar ese concepto redentor entre los militantes o simpatizantes de un partido democrático que debería excluir de su proyecto a toda costa unas premisas de tan aciaga recordación.

RedDiario
Editorial
RAJOY SE LEPENIZA
Rajoy ha optado por la lepenización. Es difícil hacer previsiones respecto a unos resultados electorales muy inciertos por la incapacidad de Zapatero para articular estrategias mínimamente coherentes.Pero hay cosas que deberían quedar al margen de la estrategia electoral. Rajoy, por simple sentido común, no debería haberse deslizado hacia esos caminos que, por lo demás, tienen un difícil retorno.
Diario Ibérico

16 comentarios:

Anónimo dijo...

Es que como dices es lo único que le queda al PP para hacer oposición, salvar a la patria de su disolución, lo mismo que penso Franco ante el peligro blochevique y Santaigo Matamoros ante el sarraceno, mil años de historia y hay gente que aspira a gobernarnos con esas premisas.

Anónimo dijo...

En primer lugar: No porque D. José Blanco diga que la declaración de Rajoy es institucional, lo es. En segundo: Si los símbolos de la nación española son de todos, aquel que los usa no se apropia de nada, pues usa lo que es suyo. Como, además, no se prohíbe el derecho a que los use cualquier español la idea de la "apropiación indebida" queda sin fundamento.Por último, y en tercer lugar, si cuando se aplaude al Presidente del Gobierno nadie objeta nada, no cabe quejarse cuando se le abuchea.
La razón está para emplearla, no para manipularla. No obstante, si se desea manipularla hay que hacerlo bien y no usando argumentos tan pobres como los del Señor Blanco. Y basta ya, por favor, de predicar que el PP es sucesor del franquismo y el PSOE sucesor de la II República. La fiesta nacional es de todos los españoles; la bandera, también y el himno también. Si algunos desean usarlos y otros no ambos están en su derecho. Y en cuanto a la Ley hay que decir que , aunque obliga a colocar las bandera española en todos los organismos oficiales, en algunos Ayuntamientos gobernados por el PSOE gracias a pactos, no ondea.

Anónimo dijo...

El orgullo de sentirse francamente españoles, si hasta el propio Rajoy lo dice.

Anónimo dijo...

El orgullo de sentirse francamente españoles, si hasta el propio Rajoy lo dice.

Anónimo dijo...

No obstante, si dijera "infrancamente" españoles estaría hablando sin duda del Señor Zapatero. El mismo que dijo que "el concepto de nación es disuctible y discutido"

Anónimo dijo...

Lo dicho es lo que está dicho y no hay vuelta de hoja, francamente.

Anónimo dijo...

Yo creo que los populares están tan nerviosos con las listas de Madrid y Gallardón y todo eso que sehan puesto nerviosos y se la han enjaretado a Rajoy, como si alguien lo quisiera empujar hacia el abismo haciendo ese No-Do.

Anónimo dijo...

Pues yo creo que están muy contentos y no es para menos, tratándose del partido de la oposición. Gracias al señor Zapatero el socialismo español ha perdido una de sus principales señales de identidad: la de ser antinacionalista a ultranza. Si yo fuera socialista me sentiría bastante decepcionado, francamente.

Anónimo dijo...

Aquí no hay que ser antinada, únicamente sobran los que son antidemócratas, sean nacionalistas de las España una o de la Cataluña, el País Vasco o la Galicia igualmente unas que no admiten la pluralidad en sus respectivos países.

Anónimo dijo...

Dios, patria y rey, quienes invocaron esos nombres llenaron España de guerras civiles.

Anónimo dijo...

Babi tiene razón. No obstante, como la principal manifestación de democracia es el absoluto respeto por la Ley y como el Gobierno no la respeta, según qué casos, creo yo que habría que elegir a otro que la respetara en todo caso.

Anónimo dijo...

Rajoy, como en el 14 M, acaba de favorcer con su comparecencia el voto de los abstencionistas a favor del PSOE. Que siga así.

Anónimo dijo...

El PSOE, en cambio, ya tiene el partido de Rosa Díez para evitar que se abstengan los votantes de ideología socialista. Y es evidente que cada vez que habla Zapatero gana votos, aunque las encuestas no parezcan reflejarlo.

Anónimo dijo...

Aplíquese a el voto Díez más bien entre los abstencionistas del PP.

Anónimo dijo...

Pues si existiendo abstencionismo en el PP, sus votos casi igualan ahora a los del PSOE, no quiero imaginar lo que ocurrira si conservando sus votos el PP, hay votos también para el partido de Rosa Díez. A lo mejor también tiene la culpa de la evidente escisión el PP.

Anónimo dijo...

A ver si Aznar colabora con sus colaboraciones para que el PSOE gane mejor.

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