Lazarillo
El Diario-La Prensa no es uno de esos grandes medios que citan los grandes medios para avalar la percepción mediatizada de los hechos que sustentan los intereses de los grandes medios. Se trata de un periódico de Nueva York que en su edición de hoy, víspera del día de la gran masacre, insiste en la posibilidad de que los atentados del 11-S fueran coordinados desde el Gobierno de los Estados Unidos para justificar el militarismo galopante que guía desde entonces el proceder de Washington. Para sustentar esa percepción es de recordar que según una encuesta de la consultora Zogby el 51 por ciento de los norteamericanos cree que tanto el presidente Bush como el vicepresidente Cheney están implicados en esa trama. Don Juan Barrios, articulista del periódico neoyorquino, especula hoy en su columna acerca de la probabilidad de que Osama Bin Laden trabaje para los organismos de inteligencia subordinados a la Casa Blanca: Las apariciones audiovisuales del líder de Al Qaeda, según el periodista, suelen venir a refrendar la actitud belicista del presidente norteamericano, tal como ocurrió recientemente cuando el señor Bush justificó la retención de las tropas del Pentágono en Irak y Afganistán. Los resultados del mantenimiento de esa acción armada ocupan el siguiente párrafo en la columna del articulista: El informe preparado por la Escuela de Salud Pública de la Universidad de John Hopkins estima que de marzo del 2003 a julio del 2006, unos 600,000 civiles iraquíes fueron asesinados en esta guerra sucia. En asuntos de probabilidades ya pasamos del millón de personas. Por otro lado, de acuerdo a CNN hasta el 6 de septiembre de 2007 había unos 3,753 soldados estadounidenses asesinados en Irak. Hay que sumarle a estos números las pérdidas de las llamadas fuerzas aliadas las cuales han puesto un total de 261 soldados asesinados. Solo de Septiembre 2006 a septiembre 2007, 1,046 soldados estadounidenses murieron en esta guerra inadmisible, y de estos el 58% entre las edades de 18 a 24 años. Dato alarmante es que el 10% eran jóvenes latinos.
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EL CUENTO DE AL QAEDA
"La ilusión de Bin Laden de que Estados Unidos se desintegraría después del tercer y definitivo ataque es equiparable a la absurda idea del Gobierno de Bush de que Al Qaeda estaba en el centro de una conspiración mundial de organizaciones armadas islámicas".
Loretta Napoleoni, economista, periodista, novelista y experta en el mundo árabe, nos da hoy en El País una visión sobre Al Qaeda bastante diferente a la divulgada por los políticos y la prensa occidentales.
Arsenio Escolar
1 comentario:
Cuando sepamos que pasó con los dos aviones que se esfumaron en el aire, sabrmos un pco más de la identidad de Ben laden.
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