lunes, 5 de febrero de 2007

ETA no puede decidir más que su final

Félix Población

Quedan muy pocos meses para las elecciones municipales y autonómicas y más de un año para las generales. La vida política española parece centrada a estas alturas en lo que haga o deje de hacer ETA hasta la celebración de unos y otros comicios. El atentado del pasado día 30 de diciembre en el aeropuerto de Barajas está determinando en exceso el comportamiento público de la airada oposición. La manifestación del pasado sábado contra el Gobierno es sólo el principio de una trayectoria cuyo grado de incidencia crítica lo establecerá en buena medida qué haga o deje de hacer la banda armada. El Partido Popular sabe que ésa es la baza que más resultado le puede dar de ahora en adelante con la perspectiva puesta en las urnas.

Está claro por lo tanto que don Mariano Rajoy no colaborará con el Gobierno en ninguna política antiterrorista que no implique por parte de ZP una rectificación de la mantenida hasta ahora. Basada ésta en que para acabar con la violencia no se debe reparar en esfuerzos, incluido el del diálogo, siempre que ETA garantice el fin de su actividad, lo que el Partido Popular exige es que no haya negociación alguna y se acabe con los etarras mediante la aplicación de las leyes vigentes y la persecución policial hasta la definitiva derrota de la organización terrorista.

Pocos en la cabecera del partido conservador, mucho menos aquellos que han tenido responsabilidades de Gobierno, pueden reclamar la verificación de ese objetivo sin reconocer en su fuero interno que esa posibilidad resulta más que aventurada, aunque de momento les sirva para movilizar a lo más derechista de su electorado. Es más, si el Partido Popular retornara al poder -en el supuesto caso de que su campaña de oposición a la política antiterrorista de ZP diera resultado-, asistiríamos con toda seguridad a la reiteración del diálogo con ETA, reducida entonces como ahora a una única condición: la disolución definitiva de la banda.

¿Dará resultado la campaña del PP contra la política antiterrorista del Gobierno? Es de temer que para que esto ocurra, la airada oposición va a depender mucho más de lo que pueda hacer o no hacer ETA a partir de ahora, según su habitual estilo, que de sus propias alternativas. Confiar en eso para retornar al poder, después de una legislatura en la que por primera vez la oposición ha dejado solo al ejecutivo frente a la violencia, resulta un tanto espurio y puede que el electorado se lo tenga en cuenta a la hora de votar. ETA no puede decidir la gobernación de España. A la banda sólo le cabe decidir su final y para eso este Gobierno sigue estando más cerca que lo estuvo ninguno hasta el presente.

RedDiario

Noticia
DE JUANA, PARTIDARIO DE SEGUIR DIALOGANDO
En una entrevista en exclusiva concedida al diario The Times, el etarra en huelga de hambre, que aparece fotografiado en su lecho del hospital, pide al Gobierno que continuen las conversaciones para resolver el conflicto entre el País Vasco y los Estados español y francés.
El País.

Breviario

¡¡¡INSÓLITO!!!
Los símbolos que juntos marchan en la manifa del pasado sábado son, efectivamente, los de la gallina imperial y la hoz y el martillo. Recolecto la imagen a través de mi colega Royo, con abundamiento en la instantánea a cargo de don Ramón Cotarelo. He de confesar con toda modestia que no tengo palabras para aclarar con la razón ese espejismo. Lo dejo a la libre opinión de quienes tengan a bien sacar alguna conclusión medianamente verosímil que me argumente el quid vincular de enseñas tan antagónicas.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues verá usted, D. Félix: Que lo decida y después ya se verá lo que pasa. La "airada" oposición saldrá siempre "airosa" en su oposición al Gobierno mientras éste defienda la negociación con una banda que acude a las mesas con pistolas y que con toda la desfachatez del mundo reclama diálogo bajo amenazas de muerte. No se trata de ideologías, sino de sentido común y de saber un poco de Historia. La ciudadanía puede no saber mucho de Historia, pero posee un sentido común que ya lo quisieran para sí muchos miembros del actual Gobierno y algunos de la oposición. Quien desde luego tiene la obligación de saber Historia es nuestro actual Presidente de Gobierno.

Anónimo dijo...

Pues claro que tiene sentido común la ciudadanía, por eso "botó" al PP y el Gobierno es el que es. En cuanto a lo airoso de la oposición, ya lo dirán las urnas, de momento sólo es airada y a su política me remito.

Anónimo dijo...

Sí, claro. Lo "botó" por sus errores, que también los cometió. Pero ese es un tema muy diferente al que comento. No sé lo que dirán las urnas, desde luego. Lo único que sé y que me consta es que a la ciudadanía no le gusta que se negocie con ETA. En esta cuestión, la política del PP es popular; en otras, pues ya es diferente.

Anónimo dijo...

A ver: No es gallina, sino águila y no es imperial porque no tiene dos cabezas. Se llama el águila de San Juan. Seguramente está tan próxima a la hoz y el martillo porque mientars Franco proclamaba "desde el Imperio hacia Dios", Lenin clamaba por el imperio de los campesinos y trabajadores. ¡Ah¡ La hoz y el martillo simbolizan el trabajo y no que se desee cortar y machacar al capitalismo.

Anónimo dijo...

Ningún águila, incluso la imperial, que está en peligro de extinción pese a su pretensión de llegar a Dios desde el imperio, tiene dos cabezas. En cuanto al significado de los símbolos, repárese en la historia y júzquense sus refriegas, de las que España más que ninguna nación ha sido víctima.

Anónimo dijo...

Cierto. Pero el águila imperial rusa sí que las tenía y el águila de los Habsburgo también. El águila de San Juan, en cambio, solo tiene una especie de aureola dorada debido, quizás, a que representa a San Juan. El ser humano es, por lo visto, un animal simbólico. En cuanto a las luchas que los seres humanos mantienen entre sí, no existe razón alguna que las justifique. Conviene, no obstante, evitar favorecerlas

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