jueves, 7 de diciembre de 2006

Sólo queda el silencio de Aznar y sus mentiras

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Félix Población

No hace mucho, el ex presidente Aznar, después de formular alguna de sus aventuradas observaciones sobre la realidad patria, expresó su deseo de que le dejen en paz pues su condición es la de un retirado de la política. No se puede considerar como tal, sin embargo, a quien, aparte de una manifiesta influencia en el equipo directivo y el rumbo de su partido, no ha dejado de criticar pública y sañudamente al señor Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno de su país, cada vez que ha tenido oportunidad de hacerlo en cualquier foro nacional o internacional, incluso cuando ZP retiró cívica y democráticamente a las tropas españolas de Irak, coherente con la voz y el voto que le otorgó la ciudadanía.

Estos días ocupa la primera plana de los periódicos el llamado informe Baker, presentado por Lee Hamilton y James Baker, documento elaborado por una comisión independiente de expertos en el que se subraya que la actual estrategia de Washington en Irak no es viable y que los Estados Unidos deben comenzar unas conversaciones con Siria e Irán para tratar de mejorar la conflictivas circunstancias que se dan en la región. El informe, que aconseja la retirada gradual de la ocupación, expone la gravedad de una situación a la que diariamente asistimos a través de los telediarios, con un incremento creciente del río de sangre civil que con rutinaria puntualidad no deja de correr por las calles de aquel país invadido.

Ayer mismo, como para ilustrar con sangre propia y reciente la cruenta incidencia que está teniendo en USA la ocupación militar norteamericana de Irak, diez soldados de los Estados Unidos se han sumado a los casi tres mil que han muerto a lo largo de un conflicto cuyo coste podría superar en breve el billón de dólares, según datos ofrecidos por el señor Hamilton.

El documento de la comisión Baker-Hamilton, junto con otro coordinado por el Consejo de Seguridad Nacional, deparará al señor Bush unas conclusiones sobre las que se actuará en cuestión de semanas para verificar las correcciones estratégicas que sea menester. Tanto Blair como Bush, éste después de un varapalo electoral, han hablado de errores en los últimos meses. Sólo don José María Aznar parece mantener con su sonado silencio las mentiras que como presidente del Gobierno de España implicaron a nuestro país en aquella gran masacre de la que tenemos noticia cotidianamente.

¿A qué paz puede aspirar quien es incapaz de conmoverse y pedir perdón por sus falacias ante ese largo e interminable calendario de terror y mortandad? También convendría saber, ahora que todos parecen coincidir en resaltar errores menos nuestro ex presidente, ¿dónde le cabe reclamar al pueblo iraquí por la miserable añagaza de esa teórica democracia venidera, vendida sin recato por sus invasores, y que ha sumido sus días y sus noches en un río de muerte?

RedDiario

Artículo
¿SALEN LAS TROPAS DE IRAK PARA OCUPAR IRÁN?
Mientras continúan las presiones para el retiro de los marines que ocupan Irak, un sector de los halcones impulsa la intervención armada en Irán. El presidente Bush en medio de una encrucijada.
Roberto Aguirre, APM.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es escandaloso oir "Dejenme en paz" a quien no tuvo reparo en dejar en guerra a otros. Éstos sí que tienen guerra de verdad y que no tienen a quien reclamar la paz.

Anónimo dijo...

Que le dejen en paz con sus negocios y los de su amigo Bush, causantes de cientos de miles de víctimas.

Anónimo dijo...

¿Cómo pudo ese señor llegar a presidir al gobierno de España?
Igual que Bush el de USA, se podría responder.

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