Méjico en vilo

Celestina Tenerías

Méjico esta en vilo. Nunca con tal inquietud y expectación se aguardaron los resultados de unos comicios tan reñidos y en los que la ciudadanía participó tan masivamente. El activo balance del electorado da idea de que, por muchas que sean las descreencias en una clase política no precisamente modélica como la mejicana, la sociedad sigue recurriendo al voto como más socorrida y convincente herramienta para mejorar la más que mejorable administración pública. Pero la histórica jornada del pasado domingo en aquel extenso y querido país también confirma algunos de los peores temores previos a la fecha de la consulta: el escenario de la indefinición prolongada de los resultados, una autoridad electoral rebasada por los contendientes y la perspectiva de un veredicto que no va a ser fácilmente aceptado por las fuerzas rivales, no sólo por la indefinición en la que terminó este larguísimo día, sino por las distorsiones en que se desarrollaron las campañas previas y por la indebida intervención del gobierno federal en el proceso para invalidar una de las candidaturas y favorecer a otra. ¿Por qué esa demora en los resultados finales? ¿Se trama algo contra quien puede resultar menos provechoso para el Imperio? Elecciones contaminadas, titula La Jornada de Méjico.

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NR: El prestigioso analista político mejicano don Alfredo Jalife advierte: Méjico es el país del fraude electoral.

+NR: ¿Cuál será el efecto de la incertidumbre? Encuesta de BBC.

++NR: Tras la contabilidad de miles de votos que habían sido desestimados y se encontraban al parecer en el archivo de inconsistencias, la distancia entre el candidato de la derecha y el de la izquierda se reduce a la mitad y no al revés.