YOLANDA DÍAZ Y MARÍA JIMÉNEZ

 

Lazarillo

Me parece que queda suficientemente claro en la respuesta de Sixto lo que la señora Díaz se merece con ocasión de su comentario en relación con el fallecimiento de la cantante María Jiménez. La lideresa de Sumar, que por ocupar la vicepresidencia segunda del Gobierno en sustitución de Pablo Iglesias y haber sido señalada por éste como su posible sucesora se ha llegado a creer el liderazgo que ostenta, debería reparar en sus palabras a la hora de redactar algo tan sensible como un tuit. Que después de lo ocurrido con el veto a Irene Montero, la ministra de Igualdad, para formar parte de las listas electorales de Sumar en representación de Podemos, esa señora haya descrito a María Jiménez como una mujer que "nunca se calló y puso voz a muchos gritos silenciados", me parece deplorable, porque si ha habido alguien en el Parlamento de la nación que queda cabalmente reflejada con esas palabras es su compañera en el ejecutivo y en Unidas Podemos. Fue doña Yolanda la que quiso que esa voz fuera silenciada en las listas electorales y es la máxima responsable, por lo tanto, junto a alguno de sus compañeros en esas listas, de que Sumar fracasara en las pasadas elecciones generales, poniendo muy difícil la repetición de un segundo gobierno de coalición progresista. Si Podemos no tiene voz en ese gobierno, como Díaz pretende, la legislatura será lo que quiera el PSOE, y el PSOE solo siempre quiso muy poco.

DdA, XIX/5.439