lunes, 5 de abril de 2021

PROHIBIDO HABLAR BIEN DE "PODEMOS" EN CASI TODOS LOS MEDIOS



Raúl Solís

De Podemos no se puede hablar bien. Está prohibido en todas las redacciones de la ‘prensa seria’, esas que se dan golpes de pechos hablando de libertad de prensa, pero que vulneran cada día el derecho a la información de los ciudadanos. Salvo raras y honrosas excepciones, todos los tertulianos y periodistas te dirán que “sí, pero es que”. Y el “pero es que” no se argumenta sobre las medidas políticas aprobadas por Podemos ni sobre su programa electoral, sino sobre el carácter, obra y milagros de Pablo Iglesias y los líderes de la formación. La religión oficial de España es el odio a Podemos. Las tertulias se parecen cada día más a una mesa redonda para opinar sobre Gran Hermano, Supervivientes o La Isla de las Tentaciones que a espacios de análisis político. Sería revelador que los tertulianos, para poder participar en estos espacios de ‘infoxicación’, tuvieran que hacer un comentario de texto sobre los últimos tres libros que se han leído. Nos daríamos cuenta de la mediocridad de quienes tienen entres sus atribuciones constitucionales la gestión del derecho a la información, un derecho fundamental establecido en el artículo 20 de la Constitución, y la vacuidad intelectual que habita detrás de frases hechas, anecdotarios, obviedades y tanta impostura travestida de estatus.

A extender la mancha sobre un partido político, el más investigado de la historia de España y el que tiene su hoja de servicio más limpia, ayudan también los progres que saben que darle leña a Pablo Iglesias cotiza al alza y les ayuda a salir en los medios de comunicación. Se creen estos animadores de la caverna mediática que los favores que le presta la prensa es porque son muy dichosos, muy guapos o muy listos. O las tres cosas a la vez.

Pocos medios han publicado el hecho diferencial de la lista electoral de Unidas Podemos a la Comunidad de Madrid. Al contrario que la del resto de partidos, está elegida en primarias y en ella participan, en puestos de salida, no de adorno, personas, en calidad de independientes, que son referentes de los movimientos sociales y la sociedad civil madrileña. Personas de reconocido prestigio que demuestran que Podemos sigue siendo un proyecto vivo, atractivo y conectado con la calle, por mucho que haya quienes lleven desde 2014 afirmando que Podemos no conecta con las reivindicaciones del 15-M.

A pocos medios les ha dado por entrevistar a Alejandra Jacinto, abogada de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, curtida en mil batallas en defensa de la vivienda y contra los desahucios en una región especialmente afectada por los precios de los alquileres debido a demasiados pelotazos urbanísticos como la Operación Chamartín.

Tampoco se ha puesto en valor el fichaje de Serigne Mbayé, joven de origen senegalés que se jugó la vida para llegar a un país que lo condenó a vender en la manta, a la pobreza y el racismo institucional. Ahora, aunque es empresario de una cooperativa y ya tiene la nacionalidad española, sigue defendiendo a los que sufren las políticas migratorias que él sufrió. Los mismos medios, tertulianos y políticos a los que se les ha quedado la boca seca hablando de Hamala Harris, la vicepresidenta de Estados Unidos, cuyos padres llegaron en avión a estudiar un posgrado universitario, no a tirar la manta en medio de una avenida y arriesgarse a que la policía se los llevara preso. A la progresía estética patria le gusta mucho los relatos que no suponen una enmienda a la totalidad a sus privilegios de clase, por eso veneran a la vicepresidenta de Estados Unidos y ocultan a Serigne Mbayé. No es la diversidad, es la clase lo que les mueve. La suya. En España se lee mucha novela y muy poco ensayo. Nos gusta poco la verdad y somos expertos en tejer relatos, que es una forma muy fina de decir que algo no es verdad.

Menos se ha dicho de Agustín Moreno, un profesor de instituto de Vallecas, histórico dirigente y afiliado a Comisiones Obreras desde la clandestinidad e impulsor de la Marea Verde en Madrid, cuyos alumnos lo despidieron cuando se jubiló en un largo aplauso por los pasillos del centro educativo que lo hicieron viral sus propios alumnos en agradecimiento a un hombre que les enseñó a ser buena gente y a ser ciudadanos libres, mucho más importante que aprobar la asignatura que impartía, Historia.

Otro de los fichajes de Iglesias, que en sí mismo llenaría de valor la candidatura, es el de Beatriz Gimeno, que si bien es cierto ya había sido antes diputada de Podemos en la Comunidad de Madrid y viene de dirigir el Instituto de las Mujeres, no es menos cierto que es una de las teóricas feministas más relevantes de España y la mujer que diseñó la estrategia, junto con Pedro Zerolo, que permitió que en un país sotana y sacristías se aprobara una ley de matrimonio igualitario mucho tiempo antes de lo que ella misma pensó que se podía aprobar.

También va en la lista Jesús Santos, teniente de alcalde de Alcorcón, conductor del camión de la basura que en las elecciones municipales obtuvo uno de los mejores porcentajes de voto de Podemos y que logró, liderando una huelga general, unas buenas condiciones laborales para los trabajadores de la empresa municipal de limpieza. Julio Rodríguez, exJemad con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, también participa en una lista electoral que incluye nombres atractivos, de gente con experiencia en diversos campos.

En el PP, tres tránsfugas procedentes de Ciudadanos

En el PP, los fichajes más resaltables son tres tránsfugas procedentes de Ciudadanos que dejaron su escaño cuando ya se había disuelto la Asamblea de Madrid: Toni Cantó, Sergio Brabezo o Marta Marbán. Eso sí, la operación de comprar diputados se ha llamado “Operación Libertad” mientras que a la lista de Iglesias la han llegado a denominar “Arca de Noé” de forma peyorativa.

Ciudadanos, fiel al dicho popular que dice que en tiempos de crisis no hacer mudanza, se presenta con una lista de afines a Inés Arrimadas que darán la batalla casi imposible de superar el suelo del 5%. Vox tampoco ha hecho ningún cambio. De hecho, los 12 primeros puestos de la lista electoral, con un antiguo miembro de los grupúsculos de Fuerza Nueva como número dos, son los mismos que ya concurrieron en las elecciones de 2019.

Lejos de incluir a nadie de la sociedad civil, el PSOE ha castigado a la histórica activista transexual Carla Antonelli hasta el puesto número 35, cinco puestos por debajo del lugar en el que concurrió en 2019. Antonelli está siendo una de las voces más activas a favor de la ley trans que ha elaborado el Ministerio de Igualdad y que el PSOE tiene bloqueada su tramitación. Por su parte, el partido de Iñigo Errejón, cuya candidata es la médica y portavoz del partido Mónica García, ha incluido en su lista a los primeros espadas de la dirección política y tampoco ha incorporado a nadie de los movimientos sociales.

Como de Pablo Iglesias y Podemos sólo se puede hablar mal, porque el objetivo es diabolizar en base a moralismos a una formación que, lejos de tener postulados radicales, defiende medidas que están a la derecha de la socialdemocracia europea de posguerra. Nadie dirá que el legado político de Pablo Iglesias en el Gobierno de España se ha saldado con el mayor nivel de protección social de la historia de España, que su cabezonería ha servido para hacer posible que las ayudas a empresas hayan sido directas y en forma de ERTE y no en forma de endeudamiento a través de los bancos, como pretendía Calviño y el ala más neoliberal del PSOE

Tampoco se dirá que con Iglesias se han prohibido los desahucios y los cortes de suministros básicos durante la pandemia, en contra de lo que querían los socialistas, que creen que todo es un bien de mercado. O que el sueldo mínimo ha pasado de 750 a 950 euros en sólo tres años por el concurso directo de Unidas Podemos. De Podemos sólo se puede hablar mal, por eso hay quienes han renunciado a hacer periodismo y se han convertido en portavoces de los dueños de España que lo tienen todo y quieren todavía más.

No haría falta ni siquiera que los medios de comunicación hablaran bien de Podemos, sería suficiente con que hicieran periodismo ponderado y no burda propaganda que lleva desde 2014 intentando diabolizar a una opción política que con su irrupción lo puso todo patas arriba y se ha convertido en un detector maravilloso de reaccionarios y de progres estéticos que están encantados con ser la nota de color del sistema, pero que se incomodan cuando el sistema se tambalea.

El circo del Estado del 78 hace aguas por todos lados mientras los necios miran a Pablo Iglesias en lugar de mirar la corrupción de las empresas del IBEX-35, a los tejedores del caso Gürtel, caso Púnica, caso Ambulancias, caso Bárcenas, caso Universidad Rey Juan Carlos I, caso Lezo, caso EREs, caso rey emérito fugado que traía millones a España en maletas desde dictaduras árabes y a los medios de comunicación que han sido cómplices y valedores de tanta inmundicia. El gran problema de España es el desprecio a la verdad, no Pablo Iglesias, por eso no se puede hablar bien de Podemos y de Pablo Iglesias ni aunque lo hagan bien.

La última hora DdA, XVII/4810

2 comentarios:

Unknown dijo...

Excelente artículo. Por fin alguien cuenta las verdades sobre la próxima campaña electoral en Madrid. En muy pocas palabras, pero bien claras, se expone la realidad de cada partido presentaque se presenta al

sMAb dijo...

Piensa en Global y actua en Local. PODEMOS no es mas que una "primavera arabe" de Soros y su "OTPOR Inc."

Publicar un comentario