domingo, 3 de marzo de 2019

Y DECORA LAS AGUAS DE TU RÍO/ CON HOJAS DE MI OTOÑO ENAJENADO

Lazarillo
Es muy posible que finalizada la actual legislatura, todavía tengamos que soportar algunos meses más - me resisto a creer que puedan ser más años- la permanencia de los restos del dictador en el santo sepulcro de la abadía del Valle de los Caídos, mientras seguimos desconociendo el ignoto lugar donde fue enterrado uno de los más sobresalientes poetas de nuestra literatura, asesinado por las tropas golpistas. Siempre he dicho que esa doble circunstancia simboliza la mayor lacra de la democracia española en curso: la de los miles de republicanos enterrados como alimañas en fosas y cunetas. Cada vez que leo o releo un poema de Federico García Lorca, la luz y vida que hay en su obra ilumina el osario oculto de tantas víctimas de la barbarie franquista. 
*Aprovecho esta nota para recomendar el espectáculo Federico hacia Lorca, que a partir del 21 de marzo ofrecerá en Madrid la Joven Compañía bajo la dirección de Miguel del Arco. En el mismo se incluyen una serie de textos del poeta granadino, con dramatización de Nando López e Irma Correa. Imaginemos un texto habitado por momentos desde la llegada a la residencia de estudiantes de Madrid hasta la bala qe lo atravesó. Se trata de un acercamiento al Lorca joven y al Lorca amigo, al excesivo, al viajero, al amante de la piel y las palabras. Habrá que verlo.

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Soneto de la dulce queja

"Tengo miedo a perder la maravilla
de tus ojos de estatua y el acento
que me pone de noche en la mejilla
la solitaria rosa de tu aliento.
Tengo pena de ser en esta orilla
tronco sin ramas, y lo que más siento
es no tener la flor, pulpa o arcilla,
para el gusano de mi sufrimiento.

Si tú eres el tesoro oculto mío,
si eres mi cruz y mi dolor mojado,
si soy el perro de tu señorío,

no me dejes perder lo que he ganado
y decora las aguas de tu río
con hojas de mi Otoño enajenado".


                     DdA, XV/4104                  

1 comentario:

Anónimo dijo...

Comentario de texto del "Soneto de la dulce queja”, Federico García Lorca (1936)
1. Contextualización
Este texto pertenece al género lírico, puesto que es poesía. Concretamente a la obra
“Sonetos de amor oscuro”(1936) del poeta, dramaturgo y prosista español Federico
García Lorca. Lorca que perteneció – y fue uno de los mayores exponentes- a la
Generación del 27, grupo que buscaba renovar la poesía española sin que ello supusiera
abandonar sus señas de identidad.
La obra de Lorca suele dividirse en cuatro etapas, y este soneto pertenece a la última de
estas, que se caracteriza por el retorno a los metros y formas clásicas. El poemario en el
que se inserta el "Soneto de la dulce queja” fue publicado, póstumamente, por los amigos
de Lorca. El tema común en el poemario es el dolor por el amor profundo y desesperado
(por no ser correspondido).
2.Tema
El tema del poema es la exteriorización del miedo que le provoca al poeta la pérdida del
ser amado, y la súplica para que no lo abandone –a pesar del dolor que le causa-.
3. Estructura
En lo que respecta a la estructura externa, podemos ver que el poema está compuesto
por catorce versos endecasílabos que se agrupan en dos cuartetos y dos tercetos; y que
presentan rima consonante (ABAB ABAB CDC DCD), una variante del soneto clásico.
En cuanto a la estructura interna, podemos ver que el soneto se divide en dos partes: En
los versos 1 y 8 se expresa la idea del miedo al abandono por parte del amado, y a que el
amor no sea correspondido. En los tercetos, versos 9-14, se expresa la dependencia y
hasta la sumisión respecto a su amado, así como también la manifestación del deseo de
continuar con la relación, con ese “amor oscuro”, a pesar del dolor.
4. Análisis de la forma a través del contenido (Figuras y recursos literarios)
Comienza el soneto con“Tengo miedo...”, idea que se completa con gran calidad rítmica a
través del encabalgamiento; como podemos observar, se explica en los siguientes versos
(2 y 4) a qué se debe ese temor. A pesar de no sentirse correspondido (como veremos a
lo largo del soneto), Lorca teme perder lo extraordinario (la maravilla) que le parece a Èl
los ojos serenos e imperturbables “de estatua” (v. 2) de su amado; o la voz (el acento) que
solo Èl le murmura en la mejilla “solitaria rosa” (v.4). A través de esta metáfora podemos
entender que esa voz (acento) es dulce, delicada, única, “solitaria” y, por lo tanto,
diferente a todas las otras voces. Comienza el segundo cuarteto presentando una anáfora
respecto al primer verso de la composición “Tengo pena...” (v.5), pero ahora no se
expresa el miedo del yo lírico, sino la lástima (de sÌ mismo) o la tristeza que le produce la
situación de amor no correspondido en la que se encuentra.

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