Querido Antonio:
En primer lugar, déjame agradecerte no sólo tu carta abierta, sino también tu incansable lucha.
Desde PODEMOS entendemos la curiosidad y la demanda de la ciudadanía y
de la prensa por conocer medidas concretas del programa de PODEMOS en
Aragón. Nos parece —me parece— una demanda legítima y razonable.
A finales del mes de abril será satisfecha esta curiosidad y
pondremos fin a una espera que se nos está haciendo larga a todos y a
todas.
Larga, pero también necesaria.
Porque en PODEMOS no sólo nos importa el contenido del programa. El
contenido es fundamental, pero también es fundamental para nosotros que
el proceso de redacción sea participado y anclado a la realidad social.
En PODEMOS no escribe el programa ni el Secretario General, ni un
comité de sabios elegidos a dedo para que nos digan lo que queremos
escuchar.
Eso sería muy rápido.
Tampoco lo escriben los diputados y diputadas, quienes son tan sólo
canales de las decisiones ciudadanas; un hecho que hace incompatible con
nuestra manera de entender la política que se mezclasen primarias y
redacción programática, como propones en tu carta.
Para escribir el programa, en PODEMOS preguntamos a la sociedad
civil, nos reunimos con las personas, los movimientos y las asociaciones
y recabamos sus propuestas, así como las que llegan a través de medios
telemáticos como Plaza PODEMOS,
en los que todo el mundo puede participar. Validamos las propuestas
legal, política y económicamente, las priorizamos por su urgencia, su
impacto y su coste y finalmente las incluimos en un programa que tiene
que aprobar la gente.
Es cierto que esto es un poco más lento de lo que nos gustaría, pero
asumimos la demora con gusto. El programa es algo tan esencial para
nosotros —¡es el contrato que nos unirá con la ciudadanía!— que
preferimos cocinarlo con mimo y a fuego lento.
Nuestra área de educación, por ponerte un ejemplo, está en estos
momentos compilando e integrando decenas de propuestas para recuperar la
calidad de este derecho fundamental en Aragón; entre ellas, la que tú
mismo amablemente nos has enviado. Si quemásemos etapas, esta tarea tan
necesaria no podría llevarse a cabo con garantías.
Dicho esto y teniendo que esperar aún unas semanas para la
presentación en sociedad del programa para Aragón y todas y cada una de
las propuestas detalladas, nadie puede decir que no conoce la posición
política de PODEMOS sobre innumerables temas. No partimos de cero y la
sociedad ya sabe qué defendemos en los asuntos más fundamentales.
Son accesibles en internet para todo el mundo documentos como el manifiesto fundacional Mover Ficha, el programa de las elecciones europeas, la Directiva Villarejo, las cinco resoluciones aprobadas en la Asamblea Ciudadana estatal, el documento económico de Navarro y Torres, la propuesta Es Ahora y con Nosotras y ya más recientemente y más específico de nuestra tierra el documento político Es la Hora de Aragón con el que me presenté a la Secretaría General de PODEMOS Aragón y que fue validado por más del 70% de los inscritos.
En este documento, que supongo que has leído, se habla de política… y
mucho. En este documento se desarrollan con cierta extensión las tres
grandes líneas programáticas que PODEMOS plantea en Aragón:
- Lucha contra la corrupción, transparencia y control democrático
- La recuperación de nuestros derechos: el Plan aragonés de rescate ciudadano
- Hacia una transformación del modelo productivo y energético en Aragón
Dices en tu carta abierta que “resulta políticamente saludable
conocer no solo a quiénes se puede votar, sino sobre todo cuáles son las
ideas, los proyectos, las propuestas, los valores y las metas de
cualquier candidatura (incluida la tuya)”.
Estoy totalmente de acuerdo.
En estos documentos que menciono y enlazo se halla todo eso y mucho
más. Animo a todo el mundo a que los lea y los debata mientras esperamos
unas pocas semanas a la conclusión de los intensos trabajos de nuestras
17 áreas temáticas y a que estas líneas fundamentales de concreten en
propuestas detalladas.
Finalmente y ya despidiéndome, te digo desde el cariño mutuo que nos
tenemos que tengo que discrepar contigo en la importancia secundaria que
otorgas a ganar las elecciones.
La indignación y la esperanza son esenciales y nunca hay que
perderlas, pero la indignación y la esperanza no llenan el plato del que
pasa hambre ni pagan la calefacción del que pasa frío. La indignación y
la esperanza no aumentan las ventas del pequeño negocio que tiene que
cerrar, no garantizan una sanidad y una educación dignas y no frenan el
abandono de nuestro medio rural. La indignación y la esperanza, en
definitiva, no bastan para aplicar ese programa que con tanto criterio
demandas.
Si la gente decente no gana las elecciones utilizando herramientas
como PODEMOS, los mejores programas serán papel mojado y la indignación y
la esperanza será lo único que nos quede.
Te mando un abrazo fuerte y nos vemos en las calles,
Pablo Echenique
DdA, XII/2969
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