CONTRA EL CIERRE DE PARPAYUELA RADIO, 30 AÑOS DE VOZ VIVA

Félix Población

Me considero en buena medida un profesional que empezó a aprender cultura y a valorar mi oficio en la radio, con ser la radio de mi niñez la radio que era, devota de los principios que regían la España franquista. Tengo por eso un especial cariño por el medio y me parece que, en una democracia, las radios locales o comarcales deberían formar parte de la comunicación y cultura ciudadanas como herramienta social obligada de convivencia, información y formación. En ese sentido, no sería lo propio de una democracia acallar voces, sino más bien prodigarlas. 

Por desgracia, la democracia ha dejado de depender de sus representantes, los políticos, que deberían ser los nuestros, para ser una fórmula con la que se disimula el dominio o la dictadura de los poderes financieros -cada vez más desbocada-, y que mediante una gran estafa global a la que llaman crisis está propiciando el retroceso manifiesto de las libertades públicas y los derechos ciudadanos, sociales y laborales.

A esta dictadura, como a cualquier otra, le interesa uniformar voces -tal como está ocurriendo- para que su pensamiento -también único- prospere en defensa de sus únicos intereses, que no son los de los pueblos. Por eso, en el fondo, mi muy querida radio de los pueblos del valle del Nalón y del Caudal (Parpayuela Radio) va a dejar de dar la parpayuela, magnífico nombre para una radio de información y opinión ciudadanas.*

En nombre de la crisis se recortan las subvenciones que hacen útil y participativo un medio de comunicación, pues ese carácter constituye la esencial razón de ser del mismo. A partir de la próxima primavera, una nueva radio popular se verá abocada al silencio. La medida es perfecta para hacer cada vez más reducida la capacidad de autogestión para manifestar nuestra propia voz, allá donde la voz sea necesaria.

Esto es mucho más lamentable cuando Parpayuela Radio iba a cumplir treinta años entre sus oyentes. Arrancar de cuajo un fruto tan arraigado de cultura y libertad es, también, un crimen: como lo son el hambre, el paro, la corrupción política, la precariedad, la explotación o la ignorancia.Cada vez que se cierra un medio de comunicación como esta radio de los viejos valles mineros, tengo la sensación de que el silencio cunde y los responsables de la estafa que lo han hecho posible también lo celebran.

*Lectores que no son de Asturias me preguntan por el significado de la palabra, que en el Diccionario General de la Lengua Asturiana, aparte de ser el nombre de la codorniz, tiene una acepción familiar como lengua y/o conversación animada. 

DdA, X/2.636