Lazarillo
“Quiero decirles, compañeros, que este gobierno de Ecuador está
comprometido primeramente con su pueblo, pero también con los demás
pueblos de América Latina. Cuenten con el gobierno de Ecuador, porque ya
no somos el patio trasero de nadie”, advirtió Rafael Correa en su toma de posesión como presidente de aquel país. El discurso fue documentado y vibrante, pues el primer mandatario resumió los logros progresistas alcanzados durante su pasada legislatura, que han hecho crecer a la economía ecuatoriana por encima de cualquier otra en América Latina, sin que eso represente una constatación triunfalista, habida cuenta que lo mejor falta por llegar y no será fácil conseguirlo, advirtió el presidente. Correa tuvo muy cálidas frases de agradecimiento para los dos millones de conciudadanos que eligieron el camino del exilio para poder desasirse de la pobreza y que desde los países en donde residen han aportado su apoyo al resurgimiento de Ecuador, con la posibilidad ahora de regresar a su patria. Hizo extensiva esta invitación a los ciudadanos de esos países, víctimas en la actualidad de la crisis capitalista que asola los países del sur de Europa, y que encontrarán en Ecuador la mejor acogida. Sin opulencia y sin pobreza, ese es el porvenir que Correa avizora para su nación, consciente de que ese ha de ser también el horizonte de los países de América Latina, siempre que avancen unidos hacia la Patria Grande que soñó Simón Bolívar.
+@Resumen de las informaciones publicadas sobre la investidura del presidente Correa.
pueblos de América Latina. Cuenten con el gobierno de Ecuador, porque ya
no somos el patio trasero de nadie”, advirtió Rafael Correa en su toma de posesión como presidente de aquel país. El discurso fue documentado y vibrante, pues el primer mandatario resumió los logros progresistas alcanzados durante su pasada legislatura, que han hecho crecer a la economía ecuatoriana por encima de cualquier otra en América Latina, sin que eso represente una constatación triunfalista, habida cuenta que lo mejor falta por llegar y no será fácil conseguirlo, advirtió el presidente. Correa tuvo muy cálidas frases de agradecimiento para los dos millones de conciudadanos que eligieron el camino del exilio para poder desasirse de la pobreza y que desde los países en donde residen han aportado su apoyo al resurgimiento de Ecuador, con la posibilidad ahora de regresar a su patria. Hizo extensiva esta invitación a los ciudadanos de esos países, víctimas en la actualidad de la crisis capitalista que asola los países del sur de Europa, y que encontrarán en Ecuador la mejor acogida. Sin opulencia y sin pobreza, ese es el porvenir que Correa avizora para su nación, consciente de que ese ha de ser también el horizonte de los países de América Latina, siempre que avancen unidos hacia la Patria Grande que soñó Simón Bolívar.
+@Resumen de las informaciones publicadas sobre la investidura del presidente Correa.
DdA, X/2395
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