NO ECHEN MÁS LEÑA AL FUEGO DE LAS BARRICADAS MINERAS

Félix Población

Un grupo de mineros ha sido expulsado esta mañana del Congreso de los Diputados al exhibir camisetas reivindicativas durante la intervención del ministro de Industria, que a su vez descarta el diálogo con los representantes sindicales de los trabajadores, en huelga desde el pasado 30 de mayo ante la reducción del 60 por ciento de las ayudas del Estado al sector minero.

Ha sido el presidente del Congreso quien ordenó explícitamente la expulsión de los mineros del Parlamento, cuya razón es la palabra (también cuando se estampa en una tela). Mientras, en las zonas limítrofes de las provincias de Asturias, León y Cantabria, se están produciendo crecientes disturbios ante la falta de respuesta del Gobierno a las reivindicaciones de los mineros, a pesar de las peticiones formuladas por los gobiernos regionales. ¿Qué les queda a los trabajadores si todo se les niega: la palabra, el diálogo y una simbólica protesta allí donde está la sede de la representación ciudadana?

El Gobierno tendría que prestar atención a este conflicto. No lo apagará su indiferencia, como parece desprenderse de su silencio y del desentendimiento que el otro día protagonizó Mariano Rajoy cuando un senador socialista pretendió entregarle un casco de minero. Que el Presidente del Gobierno utilizara a sus guardaespaldas y al asistente Moragas para que alejasen al senador de su presencia, denota -aparte de un empleo dictatorial de la protección personal contra un representante de los ciudadanos- un desprecio incalificable hacia las miles de familias que pueden verse afectadas por la decisión gubernamental.

Alguien debería decirle a don Mariano que con actitudes como esa solo se consigue echar más leña al fuego que arde en las barricadas del norte.

+@The Spanish miners' strike puts their rulers on even shakier ground. Richard Seymour, The Guardian

PRIMER ESPAÑOL SIN COBERTURA SANITARIA
El primer español sin cobertura sanitaria tras los recortes de Rajoy es un arquitecto de Mataró. A pesar de que desde La Moncloa, desde Génova 13, y desde sus innumerables terminales mediáticas, en papel, radio o TDT, el Partido Popular se ha esforzado al máximo en negar que ningún español vaya a perder el derecho a asistencia sanitaria, el primer español en sufrir las consecuencias de las "necesarias" reformas de Rajoy y perder ese derecho ya se conoce.

El primer ciudadano en perder su tarjeta sanitaria no es un inmigrante ilegal ni ningún adinerado extranjero de la Costa del Sol. Se trata de un joven arquitecto de Mataró, que por haber alcanzado los 26 años y no haber cotizado a la Seguridad Social ya no podrá acceder a los servicios médicos básicos si no demuestra su condición de pobre o indigente.-Abel Martín Machado