lunes, 13 de diciembre de 2010

AZNAR SE APUNTÓ A LA GUERRA DE IRAK POR AMOR A LA PALABRA


Lazarillo

Como es bien sabido, este Lazarillo ha celebrado más de una vez la profesionalidad y agudeza de Juan Carlos Escudier en sus columnas y crónicas. Por eso suelo estar muy atento a las que firma en los medios en que colabora. La que suscribe hoy en Cuarto Poder a propósito de una cena macabea el pasado sábado en el Hotel Intercontinental de Madrid, con toda la burguesía judía residente en Madrid convocada al efecto para celebrar la tradicional Janucá, no tiene desperdicio. Sobre todo porque el evento tenía como objetivo homenajear a José María Aznar, forjador del lobby Friends of Israel que proclama ante el mundo las excelencias de aquel Estado.

Describe el cronista la identidad de algunos de los asistentes, especifica el menú de la cena a base de crema de espárragos, ensalada de pato y pularda rellena, y glosa los altruistas cimientos en los que se funda -según Aznar- el lobby en cuestión. No se trata de otra organización judía más, porque entre sus fundadores no hay judíos. Tampoco representa a ningún Gobierno ni se nutre de fondos públicos, sino “de la generosidad de donantes privados”, a los que no citó -apunta Escudier-, posiblemente porque eran sobradamente conocidos por su auditorio.

De lo que dice a continuación el cronista me interesa resaltar dos confidencias expuestas a la selecta concurrencia por la ex ministra Ana Palacio en su empeño de exaltar la figura del ex presidente y su amor por la palabra. La primera referencia proclama la sensibilidad desbordante de don José María como lector contumaz de poesía, a pesar de su adusta apariencia (¿se lo imaginan recitando?), y la segunda justifica el apoyo de Aznar a la invasión y conquista de Irak en comandita con Estados Unidos porque en este país más de cuarenta millones de personas hablan español. Esto último, según Palacio, se lo expuso Aznar a Chirac en una cena, asegurándole a éste que Francia habría hecho lo mismo de ser el francés el segundo idioma más hablado en USA.

También hemos podido saber, gracias a la crónica de Escudier, que don José María replicó al mensaje ex profeso transmitido al evento por Benjamín Netanyahu con el consejo confianzudo que hace un tiempo le diera al primer ministro israelí: Le dije: Bibi, ten cuidado porque el mundo está ansioso por encontrar a un nuevo George Bush al que culpar de todo y tú eres un buen candidato a ello (eso sí suena a Aznar). Tuvo después duros reproches para Turquía por su apoyo a la Flotilla de la Libertad, y para Argentina, Brasil y Uruguay, que reconocen el Estado palestino, y acabó con una proclamación de Israel como baluarte de primera línea en la defensa de Occidente.

El aplauso fue cerrado, escribe Juan Carlos. Era preciso agradecer la dedicación a la causa de un hombre ocupadísimo. Entre atender a Murdoch, a FAES, vigilar a Rajoy y al PP por si se desvían de sus principios, dar conferencias a cuenta de la American Enterprise Institute for Public Policy Research (AEI) y de la Heritage Foundation, subvencionadas ambas por la Exxon, y liderar el adaptacionismo al cambio climático, con fondos también de la industria del petróleo, Aznar ha sacado tiempo para entregarse a la defensa de Israel. Los 75 euros de la cena podían darse por bien empleados.

Es seguro que esa noche, ya en su confortable hogar, don José María también tendría su ratito de esparcimiento para colmar sus afanes de gozo con la lectura del Cántico Espiritual de Juan de la Cruz.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto es nacionalismo y amor a la lengua identitaria: mandar a los ejércitos a invadir países. Tomen nota los catalanes: lo suyo es agua bendita y procesión de candelas.

Anónimo dijo...

QUEREMOS QUE AZNAR RECITE POEMAS DE AMOR A BUSH YA

Anónimo dijo...

TIENE CARA DE ENFERMO, EL TÍO. O DE ALGO PEOR.

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