viernes, 7 de agosto de 2009

ALMODÓVAR PIDE AIRE PARA EL PAPA BENEDICTO


Félix Población

Leíamos anteayer en este muy discreto DdA una interesante entrevista con Fernando Suazo, ex cura dominico vasco, residente en Guatemala, donde realiza desde hace 25 años una importante labor social en pro de los más desposeídos, plenamente integrado en la cultura maya y vocacionalmente comprometido por empatía natural con la Teología de la Liberación.

Destaco de entre sus declaraciones una referente a la iglesia vaticana que se ajusta a lo que Pedro Almodóvar declaró en Berlín a una prestigiosa publicación con ocasión del estreno de su nueva película Los abrazos rotos. Es de cajón que el cine del director manchego está mucho más cerca de la realidad que la perspectiva desde la que el Padre Benedicto asienta las bases de la doctrina eclesial.

Si en la filmografía de Almodóvar no juega ningún papel el hecho de que el Papa sólo reconozca la categoría católica y romana de familia, es porque Almodóvar respira el aire corriente y moliente de su tiempo. Por eso es una locura, en efecto, que la católica iglesia no reconozca las otras familias que conforman la realidad de millones de personas. Una familia -dice Pedro- es un grupo de personas, centrado en un pequeño ser, que se quieren y cumplen sus necesidades, sin importar si se trata de padres separados, travestis, transexuales o monjas con sida.

A lo que iba con las declaraciones de Suazo: La moral que predica la iglesia oficial -afirma el ex dominico- inculca más miedo al placer que a la injusticia. El miedo suele habitar en las tinieblas. Por eso quizá desde las tinieblas, con olor a cerrado y sacristía, no se sepa discernir esa locura de la que habla el cineasta manchego, ni a que callejón sin salida puede conducir a la Iglesia. El Vaticano se va quedando a oscuras porque los dogmas no dejan pasar el aire.

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