Félix Población
Además del cooperante de Free Gaza Alberto Arce, que se ha querido quedar en la Franja con otros de sus compañeros (ver Puntos de Página) para ser testigo y asistir en lo posible a las víctimas de la masacre, hemos podido saber esta mañana, a través del programa de Radio Nacional de España En días como hoy, que en aquel territorio arrasado a sangre y fuego están abandonados a su suerte ciudadanos con nacionalidad española. El testimonio de una mujer (María Velasco) residente cerca de Rafah, cuyo marido es palestino, se dejó oír esta mañana con todo el enojo y desesperación propios del caso.
Lo que esa ciudadana española gritó a nuestro ministro Moratinos y al gobierno de su país en su conjunto es que ella y su familia está secuestrados por el Estado de Israel, mientras la destrucción y la muerte cercan su entorno y las bombas de fósforo blanco israelíes no dejan de sembrar su funesta carga explosiva sobre la población civil. Lo que esta mujer voceó al mundo es que Israel no les deja salir y nuestro gobierno es incapaz de hacer valer el derecho internacional para rescatar a sus ciudadanos de un territorio invadido y masacrado por un ataque militar.
Estos días atrás, con motivo de las nevadas que afectaron a la ciudad de Madrid, el señor Rajoy solicitó la dimisión de la ministra de Fomento por el sumo trastorno que ocasionó la excepcionalidad de ese fenómeno meteorológico -imprevisto por copioso- en el aeropuerto de la capital y en las carreteras de la Comunidad. La ministra se disculpó, no sin repartir responsabilidades con la presidenta de la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, que no lo hicieron, aunque unos y otros hubieran debido al menos compartir culpas.
Mientras aquí unos y otros se enviciaban en la baja política con las incomodidas sufridas por los contribuyentes madrileños esos días, el riesgo de muerte acompañaba desde el pasado 28 de diciembre a esa ciudadana española y a quienes como ella se sienten secuestrados por el Estado de Israel, que les impide la salida del territorio, sin que esto pareciese contar en la agenda viajera del ministro Moratinos. Tampoco, por supuesto, entre las reclamaciones de don Mariano y su Soraya Sáenz de Santamaría. El primero sigue sin pronunciarse sobre la masacre de Gaza y doña Soraya aboga por no colocarse excesivamente de parte de uno o de otro porque quien lo hace –dice aludiendo al ministro- pierde mucha credibilidad.
Nadie hasta ahora le ha preguntado al silente partido conservador por esos españoles retenidos en la Franja contra su voluntad. Estoy convencido de que don Mariano o doña Soraya nunca pedirían en este caso la justificada dimisión de Moratinos, con ser ésta posiblemente la primera vez que un gobierno deja abandonados a sus ciudadanos en medio de un conflicto armado. Hacerlo sería tanto como enfrentarse al Estado de Israel, culpable en primera instancia de no respetar tampoco en esto el derecho internacional, algo que ni Moratinos es capaz de censurar al gobierno judío para forzar la evacuación de nuestros conciudadanos, ni mucho menos el Partido Popular, mudo ante una masacre creciente de ancianos, mujeres y niños.
Me temo que ni la muerte de un ciudadano español en Gaza impulsaría esa petición de dimisión para un ministro que ya se la ha ganado por estar permitiendo hasta ahora tal riesgo, medroso ante el Estado genocida.
RedDIARIO
17-E: ¿Manifestación o concentración silenciosa? (La República).
2 comentarios:
Sin embargo nuestro ministro se ha brindado muy solícito a reconstruir Gaza...
No pasaría nada si esa mujer y sus familia fuera víctimas del terrorismo israelí.
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