Chema Morán: Espejos de agua y piedra (*)

Félix Población

Preguntadles a los niños por el agua y el fondo mágico de los charcos y por la forma y textura de las piedras alojadas al azar en la intemperie de los campos. Unos y otras han sido siempre un motivo de atracción para la naciente capacidad de sorpresa y curiosidad de sus ojos y el tacto de sus manos. Morán busca en esa plástica efímera de los espejos de agua donde anida la vida y en la irregular tersura y encendido color telúrico de los guijarros algo de lo que nuestros sentidos aprendieron a reconocer y estimar como materia elemental y próxima de los paisajes. Por eso su objetivo rinde primorosa nostalgia a esa primera memoria y nos insta a recrearla en sus imágenes, casi con la misma sensación táctil en los dedos y el mismo e iluminado acogimiento en las pupilas. Agua y piedra, tránsito de vida y perennidad.

(*) Exposición de fotografías en el Museo del Ferrocarril de Madrid (Estación de Delicias) a partir del 6 de abril.