martes, 3 de enero de 2006

Subcomandante Marcos: Somos viento

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Lazarillo

Somos viento. No tememos morir en la lucha. La buena palabra ha sido ya sembrada en nueva tierra. Esta tierra es su corazón de ustedes, y en él florece ya la dignidad zapatista.

Con estas palabras se ha lanzado a los caminos de Méjico el subcomandaante Marcos, doce años después de su rebelión zapatista en la selva Lacandona. La celebración de los comicios de julio para la elección del nuevo presidente del país ha puesto en marcha al guerrillero, que en este caso sólo empuña la palabra y cabalga una motocicleta, como hiciera el Che en 1952 durante su mocedad viajera de aprecio y reconocimiento presencial de las tierras y países de Sudamérica.

El periplo de Marcos, que durará seis meses y recorrerá las 32 entidades de la nación, ha logrado la máxima expectación en el estado de Chiapas del que ha partido. Su objetivo fundamental es establecer una política de alianzas con organizaciones electorales que se definan de izquierdas para lograr un frente no partidista, a fin de establecer acuerdos con los que hacen andar las máquinas y parir la tierra, sin que su trabajo reciba la justa retribución.

Para algunos observadores, la decisión del subcomandante es temeraria, pues no sólo corre riesgo su propia seguridad personal sino el capital político del movimiento zapatista. Si algo me pasara -ha dicho Marcos a la masiva concurrencia que le escuchaba en Chiapas-, sepan que ha sido un orgullo luchar a su lado, estoy seguro que seguirán llevando por buen camino nuestra lucha, encomendándonos a todos a ser mejores con la palabra dignidad.

Al margen de las estimaciones políticas que puedan hacer determinados analistas en su país, estimo que el momento iberoamericano elegido por Marcos es el adecuado para que la buena palabra prospere a lo largo de su ruta a ras de pueblo. Si le dejan hablar, es indudable que el subcomandante será escuchado y puede que la siembra de su voz tenga sus efectos fructíferos en el ambiente y los mensajes de la campaña electoral venidera.

ND.- Más detalles sobre el arranque de la campaña aquí.

4 comentarios:

Miguel K. Stobbs Serrano dijo...

Con toda sinceridad, no sé si Marcos ha elegido el mejor momento, ya que, por primera vez, el PRD (partido al que Marcos apoyó hasta hace un año) encabeza todas las encuestas.
Puede que el PRD no sea lo que fue bajo la dirección de Cuhautemoc Cárdenas, pero ¿puede renunciar la izquierda a su primera oportunidad histórica de ganar las elecciones mexicanas?

Anónimo dijo...

No debería renunciar la izquierda mejicano a eso, efectivamente, pero creo que en el país pueden darse dos tendencias en esa izquierda, una más pragmática y otra más utopista, por decirlo de algún modo, de la que Marcos podría ser su voz. Las dos podrían llegar a entenderse si lo que se pretende es un socialismo posible, reformador y democrático.

Miguel K. Stobbs Serrano dijo...

El problema es que con 3 fuerzas mayoritarias, PAN, PRI y PRD, una cuarta aparición de izquierda "utopista" le daría la victoria en bandeja al PRI, o al menos eso creo yo.
Es el momento de apoyar a López Obrador por el cambio de México hacía la izquierda, y quitarle a los USA su más preciado patio trasero.

Anónimo dijo...

Yo creo que las intenciones de Marcos no son electoralistas sino concienciadoras. Su táctica será un secreto hasta que no tengamos expectativas de voto entre los partidos mayoritarios. La personalidad de Marcos es el mejor aval que puede tener la izquierda en Méjico entre las clases populares. Otra cosa es la utilización que se haga del mismo. Eso, hoy en día, es un enigma.

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