La jubilación de Ybarra

Ben Al Arabiyo

Uno pensaba que hay un único gremio que queda fuera del alcance de la ley penal: el de los contratistas de obra mafiosos (creo que también hay contratistas honrados pero yo nunca vi uno). Los tentáculos de su poder alcanzan a todos los ámbitos de la vida pública: partidos políticos, administraciones, ayuntamientos, judicatura, ... haciéndoles invulnerables. Ahora tendremos que añadir a la lista el de los consejeros de los grandes bancos que más que aconsejar se dedican a apropiarse indebidamente, peseta a peseta, del dinero de sus clientes y accionistas para asegurarse una jubilación a cuerpo de rey; a ellos la pensión máxima de la Seguridad Social no les alcanza ni para puros.

Don Emilio Ybarra ha sido condenado a la pena ejemplar de seis meses de prisión por el delito de apropiación indebida de una cantidad de dinero que ni usted ni yo alcanzamos a imaginar. Pena simbólica, dicen los expertos, y eso que ni siquiera ha devuelto la totalidad de lo sustraido. Eso se llama impunidad.