viernes, 7 de octubre de 2005

Bosquimanos y diamantes

Félix Población

La de los bosquimanos es una de las tribus más antiguas de la tierra. Esto, para la Fundación Right Livelihood, es un mérito avalado y reconocido con el llamado Premio Nobel Alternativo a la organización local First People of the Kalahari comprometida con su resistencia. Pena que lo alternativo no prime para garantizar la supervivencia y los derechos de toda una comunidad histórica.

El gobierno de Botswana, al que le compete esa región, ha decidido que los últimos bosquimanos residentes allí se busquen la vida fuera de la reserva, alternativa que suena mucho a historia colonial. La de Kalahari, que era su tierra madre, ya no lo será. La ONG Survival Internacional denuncia que a cambio de ese destierro, iniciado hace un lustro y que acabó con los antiguos moradores arrumbados en las barriadas urbanas como víctimas de la miseria, el alcoholismo, la prostitución y el sida, se han multiplicado las concesiones para la explotación de las minas de diamantes en aquel territorio.

Campos de la muerte llaman los bosquimanos a su nuevo derrotero. Puede que alguno llegue hasta las alambradas de Ceuta y Melilla para evitarlos o prolongarlos. La suya, como la de quienes comparten ese mismo destino desde las naciones subsaharianas, es la peregrinación desesperada de unos pobladores a los que se les desposeyó del más elemental de los derechos.

Como el de esta vieja tribu arrojada de su hábitat histórico por la codicia explotadora de empresas sin escrúpulos, el continente africano arrastra toda una larga dominación imperialista de abusos múltiples para engorde de las metrópolis. Abandonados luego a su suerte y con serios y crecientes problemas de sanidad y miseria, esos países requieren con urgencia que Europa repare en su responsabilidad pasada y contribuya a paliar en lo posible tanta desgracia junta e incesante como los asola: hambrunas, sequías, epidemias, genocidios.

Europa no puede seguir sacando pecho orgullosa de su sociedad de bienestar sin que le duela la conciencia histórica. El lustroso brillo de los diamantes que luce ha dejado sin su solar de vida a la más vieja tribu de la tierra. Muchas de las cuentas de ese collar están ensartadas por el saqueo de una civilización depredadora a cuenta de la indigencia de millones de desposeídos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

En efecto, todo empezó mucho antes, cuando países como Bélgica el Reino Unido, Alemania y Francia asaltaron la riqueza africana. Luego se impuso la independencia pero sin que esas naciones pudieran despegar. Y el imperialismo aún sigue. ¿O cómo se puede llamar a la dominación de Irak y Afganistán?

Anónimo dijo...

El futuro puede ser peor.

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