LOS COJONES DE JAIME OSTOS

Félix Población

Con el país como está, ocupada su actualidad de pleno por el vergonzoso Caso Bárcenas que salpica al partido gobernante, el diario de la ultraderecha más afincada en su credo se permite hoy la insólita portada que aquí se muestra, por la que probablemente no debería ser noticia, ni siquiera como relevante asomo de esa España rancia y casposa que en circunstancias tan adversas como las vigentes deja asomar sus esencias retrógradas más arraigadas, al hacer de los cojones de un torero motivo -aunque sea oculto- de imagen.

Yo no sé qué dirán los prestigiosos rotativos internacionales, que en el día de la fecha no se han resistido a glosar en sus portadas los graves problemas que afectan al Presidente del Gobierno, incapaz de enfrentarse a un presunto delincuente para defenderse de sus acusaciones, pero es muy probable que con la portada de hoy no faltará entre los cronistas o corresponsales de esos medios alguno que retrotraiga ese periodismo al que se estilaba entre los círculos carlistas en los tiempos de Fernando VII, cuando se cerraban universidades y se abrían academias de tauromaquia. 

Si una portada, en cualquier periódico con un mínimo de respeto a su contenido, se debe al valor de la noticia o las noticias más destacadas de cada día, ¿díganme por favor a qué viene mostrar al avejentado torero Jaime Ostos, ocultando sus testículos al tiempo que indica al detalle la trayectoria de la peligrosa cornada que hace medio siglo le propinó un morlaco en la plaza de toros de Tarazona y a punto estuvo de acabar con su vida? 

Puede que algún lector piense que es en periodos como los que ahora vive el país cuando ese tipo de prensa gusta de afincarse en valores tan supuestamente patrios como los del toreo y el denuedo testicular de quienes sostienen ese añejo espectáculo de tortura, pero de ser así habría que preguntarse también si está en sus cabales un profesional que, como director de un periódico, opta por seleccionar y resaltar de modo tan explícto como espacioso ese tipo de noticia, cuando nuestro país es noticia en el mundo tanto por su deplorable situación económica y social como por la corrupción política que lo embarga.

PS.- En cuanto la foto de la portada de La Geceta llegó a la Red, el rostro de Ostos ha sido sustituido por el de Rajoy, como no podía ser de otro modo. Póngale cada cual el pie que guste, pero la cornada es de Bárcenas.

DdA, X/2.437