Félix Población
Cuando desde los partidos
mayoritarios se hablaba y se temía el índice de la abstención en las elecciones
de ayer, va la ciudadanía y les depara al partido mal llamado popular y al partido
peor llamado socialista obrero el mayor correctivo en sus respectivas
historias. Hasta cinco millones de votos han perdido entre ambos en los comicios
europeos con relación a 2009. Diez millones si se consideran los resultados de las elecciones generales de 2011.
Como consecuencia de la debacle,
nunca como ayer nos parecieron más viejas, trasnochadas y fuera del porvenir que
los resultados electorales insinúan -un previsible RIP del régimen del 78 -, las
declaraciones de los portavoces de los respectivos partidos al analizar los
resultados, sobre todo en versión de doña Lola de Cospedal, dado que Valenciano
admitió la entidad del desaguisado.
No es un despropósito entrever ahora la posibilidad de
que esta democracia experimente una evolución que la haga reencontrarse con el
poder de la ciudadanía. Me estoy refiriendo, obviamente, al movimiento que ayer
venció verdaderamente en España, fruto tan solo de cuatro meses de movilización
popular, del indudable carisma de su líder y de la necesidad expresa de más de un
millón de votantes de creer en otra clase de política que la que está oliendo a
podrido en este país desde hace demasiados años.
“Podemos” puede. Este es el
titular que a mi juicio debería primar en la prospectiva que se puede hacer
tras la jornada de ayer. Muchos de los ciudadanos que, como el que
suscribe, asistimos en nuestra ciudad de residencia a las convocatorias organizadas
por “Podemos” a lo largo del país, estábamos convencidos de que el clima de
expectación e ilusión despertado entre los asistentes iba a merecerse al menos
su presencia en el Parlamento de Europa.
Pocos esperaban, sin embargo, que
la representación de “Podemos” iba a contar con cinco diputados, uno menos que
Izquierda Unida, que ha triplicado lo suyos pero debe empezar a considerar seriamente que la
savia nueva que puede transformar este país tiene por líder inequívoco a un
joven profesor de Ciencias Políticas, capaz de sumar un millón y pico de votos entre una población no tan hastiada de política como para no creer en quienes pretenden
hacerla retornar a los fundamentos democráticos que deben inspirarla.
Iglesias y "Podemos" poclaman esos fundamentos, su líder está sabiendo comunicarlos y tiene a todo un sector de la población -esa juventud en paro y sin horizonte- como campo abonado para crecer y dar sus frutos, tres años después de la siembra de esa reivindicación de la democracia participativa que el Movimiento 15-M plantó en las plazas de España.
Puntos de Página
+@Iglesias: "Hay que echar al bipartidismo porque son los culpables de la ruína del país"
+@"El mediático Pablo Iglesias logra cinco escaños inesperados", titula el diario El Mundo, que pretende con sus dos calificativos aminorar el carisma de Iglesias y el efecto de Podemos entre el electorado.
+@La mala baba de dos periodistas en La Sexta Noche.
+@"El mediático Pablo Iglesias logra cinco escaños inesperados", titula el diario El Mundo, que pretende con sus dos calificativos aminorar el carisma de Iglesias y el efecto de Podemos entre el electorado.

La decadencia de un periódico también se
explica por sus portadas. Ésta es de hace
unos días.
+@La mala baba de dos periodistas en La Sexta Noche.
Así sería el Congreso si hubiera habido
generales: hundimiento del PP (de 186 a 138) y pérdida de 4 escaños en
el PSOE.
Tres fuerzas imprescindibles: Podemos irrumpiría
con 19 escaños, IU pasaría a 25 y UPyD, obtendría 10. Desaparece el
partido de Cascos y BNG e irrumpen Vox y Ciutadans. CiU baja y ERC crece
espectacularmente
DdA, XI/2.712
1 comentario:
España se merece esta mínima ilusión. No empecemos a desbaratarla antes de que los hechos cantes.
Publicar un comentario