Representantes de partidos y asociaciones que contribuyeron a la caída del medallón
Lazarillo
Falta saber si el Ayuntamiento de Salamanca, una vez acordada la retirada del medallón de Franco de la Plaza Mayor de la ciudad en muy tardío cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, permitirá que se llegue a un nuevo aniversario de la muerte del dictador sin que se cumpla lo establecido. El Partido Popular hizo hasta ahora todo lo posible porque el anterior jefe del estado permeneciera en el lugar del que ahora será por fin desalojado. Incluso desde que fue aprobada la Ley de Memoria Histórica en 2007, que dispone la eliminación de todos aquellos símbolos que exalten el franquismo.La presidenta de la Asociación Salamanca de Memoria y Justicia, María Luisa Vicente, hacía constar esta mañana entre lágrimas la emoción que se había desbordado entre los familiares de las víctimas de la dictadura al saber ayer esta noticia. La efigie del extinto caudillo esperemos que sea muy pronto una pieza museística en algún centro habilitado a tal fin, sin que su valor comporte más sentido que el de un testimonio del viejo régimen. Todavía hace unos meses, con motivo del aniversario de la muerte del dictador, el alcalde Mañueco (PP) dispuso el blindaje del medallón en evitación de que pudiera sufrir algún chafarrinón de pintura tricolor. Creo que fue el anterior alcalde, un tal Lanzarote que hoy debe trabajar como senador (PP), el que llegó a envasar la imagen de Franco al vacío, como si se tratara de preservar la conservación de un embutido de la tierra, de tan excelente nombradía y sabor.
DdA, XIV/3450
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