Manuel Antonio Goti del Sol
Vivimos en una sociedad del “no saber”. Si se te aparece un Jaguar en el
garaje, no te das cuenta; si un tipo desvía fondos del sindicato para
su bolsillo, nadie lo nota; si se reparten sobres con un sustancioso
contenido, nadie lo observa. En esta coyuntura, unas empresas que
encargan la producción a países en que el respeto a las condiciones
laborales es casi inexistente, es lógico que no se enteren de que el
subcontratista del contratista de la primera parte emplea a menores
de edad, refugiados del conflicto sirio y en condiciones infrahumanas.
Unos crean el método para que estas cosas sucedan y otros, con nuestro
consumo, damos carta de naturaleza para que estas prácticas tengan la
consideración de normales y aceptables, más allá de la protesta virtual
cuando aparece alguna foto de estos lamentables sucesos. ¿Quiénes están
dispuestos a decir “ya basta” a Inditex, o Mango? Un triste comunicado
de que ya van a tomar medidas, claro, cuando la liebre ha saltado, no es
suficiente para tapar las continúas prácticas aberrantes en las que
estas firmas están inmersas. Y, ¡ojo!, ha sido un medio con certificado
de seriedad como la BBC el que ha sacado a la luz todo esto. Pese a que
son algunas grandes empresas españolas las participantes en la timba,
aquí nadie se ha dado por enterado. Los grandes medios forman parte
sustancial y son los colaboradores necesarios de ese “no saber”. ¿Os
imagináis a Inda, Marhuenda o Rojo proporcionando esta información? ¿A
que no?
DdA, XIII/3371
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