Lazarillo
No sé si el altisonante Miguel Ángel Revilla va a ser de nuevo presidente de Cantabria, pero lo que demuestra este señor -aparte de unas condiciones naturales muy estimables para seducir a públicos y auditorios en vivo o en el plató- es una formalidad con sus compromisos y lealtades digna de encomiar. La comparte en este caso con Sor Lucía Caram y Pablo Iglesias. Los tres, a raíz de la destitución sin razones de Jesús Cintora como director/presentador de Las Mañanas de Cuatro TV, han optado por no acudir más al programa, hasta en tanto no se les expliqué por qué Mediaset tomó esa decisión. En el caso de Revilla -posiblemente también haya ocurrido con el resto de los citados, dado su gancho en la audiencia-, Mediaset ha tratado inútilmente de recuperar su participación tanto para este espacio matinal como para otros, sin que don Miguel Ángel claudicase: Solo voy si está Cintora, ha repetido. A este Lazarillo le parece muy bien esa postura, sin por ello reprochar al resto de tertulianos habituales la continuidad de su permanencia. Sobre todo a Juan Carlos Monedero, que ha vuelto, si bien desde su casa o su depacho como profesor en la Universidad Complutense. Sus análisis de la actualidad política, como los de su colega Jorge Verstringe, son toda una lección de perspicacia. Eso no empece para reafirmar una vez más que lo de Cintora estuvo muy feo.
DdA, XII/3022
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