Agradezco mucho a Olga Muñoz el testimonio que comporta las líneas que siguen, acreditadas no sólo por su palabra sino por la correspondiente fotografía, sin que la protagonista de la misma tuviera conocimiento de la imagen. Este Lazarillo aspira al país y a la política que puede representar la próxima alcaldesa de Madrid Manuela Carmena viajando en metro, de regreso a casa con las bolsas del mercado. Ya sé que habrá quienes estimen que eso no será posible cuando ocupe su cargo, pero este Lazarillo quiere creer que sí, que algún día los representantes políticos de los ciudadanos podrán comportarse y convivir como tales en la vida cotidiana. Cuando el portavoz del Partido Popular, el tal Hernando, se refiere a Carmen como un peligro para la democracia, no hace más que señalarse a él como el auténtico peligro a botar. La gente ya está en ello y acaba de dar su primera lección en las urnas. Con las declaraciones de algunos de sus dirigentes, está visto que el PP necesita otra aún más rotunda. Dice Olga Muñoz:
"Quiero
compartir algo bonito que me ha pasado hoy: me he encontrado en el
metro con Manuela Carmena. En el vagón me he decidido a hablarle,
simplemente para darle las gracias, para
decirle que da gusto escuchar a alguien honesto, sensato y que quiere
hacer las cosas bien; estaba sola y venía con sus bolsas del mercado.
Sonriendo, dijo que gracias a la gente que cree, porque va a ser
complicado. A esta conversación se unieron dos personas más, dos hombres
corbateados, uno de ellos dijo "¿Eres TÚ, verdad? Porque como vas en
metro..." Y ella dijo, "claro, yo soy una más, somos todos iguales" (a
ver cuánto tiempo puede seguir haciéndolo). La otra persona le dijo que
la conocía de los Juzgados. Entablamos una charla durante 4 paradas y
confirmo que es una mujer encantadora. Dijo que a ella no le molesta que
le hablen, al contrario, que le gusta saber, que es lo que hacían los
alcaldes de los pueblos. Le dije que además, la información es poder, y
que lo suyo no es populismo, a lo que contestó: "Exacto, yo voy a los
mercados no a hacerme fotos, sino a comprar. Eso sí, me gusta el
diálogo, así aprendo de los demás". He salido del metro hablando con el
otro señor sobre la situación política, y con la sensación de que estas
cosas son posibles; recordando el espíritu del ágora, donde los
ciudadanos hablan e intentan entenderse, donde no estamos unos contra
otros divididos en dos Españas. Estés más de acuerdo o menos con sus
ideas políticas, Manuela es un ejemplo de educación y de cordura.
Chapeu. (Ah, le dije que le había hecho esta foto de extranjis, por
cierto)".
DdA, XII/3016
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